MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, ha expresado su preocupación por las dificultades que encuentran las empresas estadounidenses en China para competir en igualdad de condiciones ante la imposición de barreras de acceso y medidas coercitivas, además de señalar el riesgo que supone la sobrecapacidad del gigante asiático en diferentes sectores ante el apoyo de Pekín.
En un acto celebrado en la Cámara de Comercio de Estados Unidos en la ciudad china de Cantón en la primera jornada del viaje oficial al país de Janet Yellen, la funcionaria ha reiterado que EE.UU. buscará una relación económica saludable con China, añadiendo que la primera potencial mundial desplegará sus herramientas económicas cuando sea necesario y de manera específica para proteger su seguridad nacional y la de sus aliados, así como los derechos humanos.
En este sentido, ha asegurado que la Administración Biden rechaza firmemente la idea de que EE.UU. deba desvincularse de China, ya que una separación económica total “no es práctica ni deseable”, puesto que Estados Unidos y China representan el 40% del PIB mundial y cuentan con los sistemas financieros más grandes del mundo.
“En pocas palabras, la relación económica bilateral entre Estados Unidos y China se encuentra entre las más importantes del mundo. Gestionarlo responsablemente es fundamental”, ha subrayado.
No obstante, la secretaria del Tesoro no ha querido dejar pasar la oportunidad de expresar su preocupación ante las quejas de las empresas estadounidenses presentes en China ante el entorno empresarial en el país para poder competir en igualdad de condiciones.
“Hemos visto a la República Popular China aplicar prácticas económicas injustas, incluida la imposición de barreras de acceso a empresas extranjeras y la adopción de acciones coercitivas contra empresas estadounidenses”, ha afirmado Yellen, para quien esta postura no sólo perjudica a las empresas estadounidenses, ya que poner fin a estas prácticas desleales beneficiaría a China al mejorar el clima empresarial.
Asimismo, Yellen también ha señalado su preocupación por el alejamiento de China de un enfoque de mercado, particularmente en referencia al exceso de capacidad, un riesgo que se ha intensificado y está cobrando impulso en nuevos sectores.
“Específicamente, el apoyo gubernamental directo e indirecto está generando actualmente una capacidad de producción que excede significativamente la demanda interna de China, así como lo que el mercado global puede soportar”, ha advertido.
Sobre esta cuestión, la expresidenta de la Reserva Federal de EE.UU. ha apuntado que, si bien estas políticas pueden estar impulsadas por objetivos de desarrollo interno, el exceso de capacidad puede generar grandes volúmenes de exportaciones a precios bajos, socavando el negocio de las empresas y los trabajadores estadounidenses, así como el de empresas de todo el mundo, incluidos India y México.
Además, esta política puede conducir a una concentración excesiva de las cadenas de suministro, lo que representa un riesgo para la resiliencia económica global, por lo que ha indicado que será un tema clave en las discusiones que mantendrá en los próximos días con sus homólogos chinos.
“Creo que abordar el exceso de capacidad redunda en interés de China”, ha afirmado Yellen, advirtiendo de que si las políticas se orientan únicamente a generar oferta y no también a generar demanda, “se producirán efectos de contagio globales”.