Celebra el 40 aniversario de la compra de la bodega por la familia Álvarez
MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
Tempos Vega Sicilia celebra este año el 40 aniversario de la compra de la bodega por la familia Álvarez, ajeno a la crisis, con una producción actual de en torno 1,5 millones de botellas al año entre todas sus bodegas en más de 140 países, frente a las 200.000 botellas que vendía en 1982, con exportaciones a cinco países.
En estos 40 años, la familia Álvarez ha creado cuatro nuevas bodegas (Alión en 1991, Oremus en 1993, Pintia en 2001 y Bodegas Benjamin de Rothschild-Vega Sicilia en 2009), y ha impulsado “notablemente” la expansión internacional del grupo, según ha destacado la firma.
“Tienen que conocerte y, si no te conocen, no te compran. Y los vinos españoles desgraciadamente en los años 80 eran poco conocidos fuera de nuestras fronteras. En esas épocas no se veían bodegueros españoles por el mundo; eran sobre todo franceses e italianos. Después de estos 40 años puedo decir que el grupo tiene una dimensión internacional que nunca tuvo”, ha subrayado el consejero delegado de Tempos Vega Sicilia, Pablo Álvarez.
Con una inversión que desde hace años supera los 600.000 euros anuales en la promoción internacional el grupo ha conseguido exportar el 70% de su producción a más de 140 países.
El director Comercial y de Marketing de Tempos Vega Sicilia, Ignacio de Saralegui, ha explicado que en 1982 Vega Sicilia exportaba a cinco países, en 2015 a 80 países y actualmente a más de 140.
“Actualmente, exportamos el 70% de nuestra producción, tenemos contacto directo con nuestros más de 250 distribuidores repartidos por todo el mundo y hemos reforzado nuestro servicio de ventas y atención al cliente”, ha señalado.
En el mercado nacional, Tempos Vega Sicilia tiene 3.700 clientes y una lista de espera de 2.500 personas para obtener el cupo de la casa.
Los clientes particulares son 2.700 y suponen el 10% de las ventas en España, mientras al resto va dirigido a la distribución (un 60%) y la hostelería (30%).
300 MILLONES DE INVERSIÓN
Para alcanzar ese balance, la familia Álvarez ha invertido a lo largo de estos 40 años unos 300 millones de euros, con unas ventas que han pasado de 1,2 millones de euros en 1982 a 60 millones de euros en 2021.
La producción ha pasado de 200.000 botellas en 1982 a una producción de 1,2 millones de botellas en 2021, mientras que los beneficios se han multiplicado desde los 400.000 euros en 1982 a los 30 millones de euros actualmente.
Asimismo, el grupo facturó en 2021 un total de 60 millones de euros y obtuvo un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 37 millones de euros.
Además, el grupo invierte cinco millones de euros al año en la renovación y mantenimiento de los activos de sus bodegas.
NUEVA BODEGA EN GALICIA
La compañía ha aprovechado la celebración del 40 aniversario para anunciar la creación de su nueva bodega, que estará situada en las Rías Baixas (Galicia) para elaborar vinos blancos con uva Albariño, la clásica de la región.
La bodega se construirá en Crecente y ya están compradas 24 hectáreas de viñedo y terrenos, fundamentalmente en Condado de Tea, en la parte alta del río Miño; en Salnés, en torno a Cambados, O Grove y Sanxenxo; y en el propio Crecente.
La inversión será aproximadamente de unos 20 millones de euros entre viñedo y bodega.
La decisión de abrir una nueva bodega en Galicia, según explica el grupo, fue tomada hace unos años al considerar que el Albariño es probablemente la gran variedad de vino blanco española y dado que la región de Rías Baixas tiene una personalidad única en España y en el mundo.
La bodega elaborará dos vinos: Deiva, (de mayor producción), y Arnela, que será el blanco premium de la bodega. La primera cosecha de Deiva está prevista para 2023 ó 2024.
El objetivo es alcanzar una producción total de 300.000 botellas con los dos vinos, siempre en función de la calidad de las cosechas.
Además del anuncio de la nueva bodega, Tempos Vega Sicilia celebrará este aniversario con la edición de un libro conmemorativo sobre la gestión realizada a lo largo de estos 40 años por la familia Álvarez.
El libro, que será editado por La Fábrica, está siendo preparado por el periodista y escritor Alfonso Armada y el fotógrafo Luis de las Alas.