MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
La plataforma turca de negociación de criptomonedas Vebitcoin ha cesado su actividad en el marco de una investigación abierta por las autoridades del país otomano, la segunda en una semana enfocada a este tipo de negocios tras la dirigida contra Thodex.
“Debido a los recientes desarrollos en el sector de las criptomonedas, nuestras transacciones se han vuelto mucho más intensas de lo esperado. Esta situación nos ha llevado a un proceso muy difícil en el ámbito financiero”, expone Vebitcoin en un comunicado publicado en su página web, inaccesible para el público desde el pasado viernes.
“Hemos decidido cesar nuestras actividades para cumplir con todas las regulaciones”, añade la empresa.
Según la agencia turca Anatolia, el Consejo de Investigación de Delitos Financieros de Turquía (MASAK) ordenó el bloqueo de las cuentas de Vebitcoin y la apertura de una investigación, que por el momento se habría saldado con la detención de cuatro personas relacionadas con la plataforma.
La investigación de Vebitcoin se suma al procedimiento en curso contra la plataforma de negociación de criptomonedas Thodex, contra cuyo fundador y consejero delegado, Fatih Faruk Ozer, fue emitida una orden de busca y captura internacional la semana pasada por un presunto fraude de hasta 2.000 millones de dólares (1.659 millones de euros).
El empresario, en un comunicado publicado en la web de Thodex, inaccesible al público desde hace más de una semana, confirmó que había abandonado Turquía el pasado 19 de abril, aunque defendió que las acusaciones de fraude eran “infundadas”.
“Las alegaciones sobre la pérdida de unos 2.000 millones de dólares de 391.000 clientes carecen de fundamento”, señaló el empresario turco, subrayando que la compañía había remitido sus cuentas a las autoridades supervisoras y asegurando que esperaba retornar al país en unos días “tras reunirse con inversores extranjeros”.
Hasta el momento, la investigación contra Thodex habría resultado en la detención de 62 personas, además de la incautación de documentación y materiales.
El próximo 30 de abril entrará en vigor en el país otomano la prohibición de realizar cualquier pago “de manera directa o indirecta” mediante el uso de criptomonedas, después de que el Banco Central de Turquía determinase el pasado 16 de abril que representan “riesgos significativos”.
En su decisión, el instituto emisor turco tuvo en cuenta que estos activos no están sujetos a ningún mecanismo de regulación y supervisión ni a una autoridad reguladora central, además de verse sometidos a una excesiva volatilidad.
Asimismo, el banco central advirtió de que las criptomonedas pueden ser utilizadas en acciones ilegales debido a sus estructuras anónimas, mientras que también pueden ser robadas o utilizadas ilegalmente sin la autorización de sus titulares, y las transacciones realizadas son irrevocables.
“Se considera que su uso en pagos puede ocasionar pérdidas no recuperables para las partes implicadas en las transacciones debido a los factores mencionados”, explicó la institución.