MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
La organización de autónomos UPTA ha remitido a la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, una serie de propuestas urgentes para aliviar la situación económica de los autónomos, que se encuentran “al límite” ante los “desproporcionados” costes de producción que están teniendo que asumir, según denuncia la organización.
Entre estas medidas, UPTA propone al Ejecutivo rebajar los tipos impositivos del IRPF a los autónomos con ingresos netos inferiores a los 18.000 euros anuales para reducir la presión fiscal y aumentar la capacidad adquisitiva de las familias.
Al mismo tiempo, reclama rebajar, de forma temporal, el porcentaje de retención del IRPF que se aplica a las facturas emitidas por los profesionales, lo que proporcionaría “liquidez inmediata”, tanto a quien contrata al servicio como al autónomo que lo presta.
En materia fiscal, la organización que preside Eduardo Abad aboga además por reducir el tipo impositivo del IVA, hasta el superreducido del 4%, para los alimentos de primera necesidad y artículos de la misma categoría que actualmente estén gravados con un tipo del 10%.
“Esta medida permitiría una bajada del precio final de los alimentos, sin que se merme la recaudación, ya que la subida del precio de los alimentos provocada por la inflación permite recaudar más”, argumenta.
TOPE A LAS COMISIONES BANCARIAS Y BONO ENERGÉTICO
UPTA también plantea reducir el importe de las comisiones bancarias, fijando un tope máximo a las mismas, para que no sean los autónomos y los ciudadanos los que acaben pagando el nuevo impuesto extraordinario a la banca puesto en marcha por el Gobierno.
Para aliviar la factura energética, la organización pide al Ejecutivo la creación de un bono para consumidores autónomos y/o microempresas que no tengan más de ocho trabajadores por cuenta ajena contratados y que hayan experimentado un incremento en los costes energéticos de, al menos, un 20% en relación con el mismo periodo del año anterior.
La cuantía de este bono energético sería proporcional al número de trabajadores por cuenta ajena contratados, para lo que propone establecer tres tramos (de 0 a 2 trabajadores; de 3 a 5 trabajadores, y de 6 a 8 trabajadores), sin que en ningún caso su cuantía pueda ser superior al 40% del coste total energético.
Por último, UPTA pide establecer medidas complementarias a las establecidas en la llamada Ley Crea y Crece, dirigidas a garantizar el cumplimiento de los plazos de pago previstos en la Ley de Morosidad entre proveedores y empresas compradoras.
“Se trata de una medida fundamental para que las grandes distribuidoras de alimentación acometan los pagos de las mercancías a los pequeños productores como máximo en 30 días. Con ello se proporciona liquidez inmediata al sector, elemento fundamental para poder mantener una correlación de precios de venta y producción”, alega UPTA.
“Desde UPTA consideramos prioritario poner en marcha soluciones para tratar de frenar el IPC y blindar a los autónomos y a sus familias de las acciones que aplicarán las entidades de crédito ante la inminente llegada de los impuestos especiales. La situación sólo puede empeorar y no debemos permitir que miles de familias, sobre todo las más vulnerables, afronten un invierno de penurias”, ha reseñado el presidente de UPTA, Eduardo Abad.