MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Los órganos de dirección de UGT y CCOO han decidido “seguir” valorando el texto de la reforma del subsidio por desempleo propuesta por el Gobierno y han aplazado su respuesta a mañana.
Por tanto, el texto que el Gobierno ha propuesto a los agentes sociales, que incorpora buena parte de las reivindicaciones sindicales, entre ellas la eliminación de los subsidios parciales y el mantenimiento de la base de cotización para los subsidios de mayores de 52 años, seguirá valorándose a lo largo del día de hoy.
De este modo, los sindicatos no dan todavía su apoyo definitivo a la reforma del nivel asistencial del desempleo después de que la anterior, tumbada en el Parlamento el pasado mes de enero por los votos en contra de Podemos, PP y Vox, no fuera negociada en el diálogo social.
No obstante, fuentes de UGT han asegurado que “el texto va en la buena dirección”, pero que todavía “quedan detalles por revisar”, por lo que el sindicato seguirá valorándolo internamente. Por su parte, fuentes de CCOO han asegurado que “mañana por la mañana” se dará una respuesta a la reforma del nivel asistencial del desempleo.
La CEOE, de momento, no ha explicitado si apoyará o no el texto final. Fuentes de la patronal han indicado a Europa Press que no tienen previsto someter a sus órganos directivos esta reforma e interpretan que la mesa de diálogo social del subsidio ha sido más un proceso de consultas que de negociación.
Durante el día de hoy, los órganos de dirección de ambos sindicatos han analizado el documento final de la reforma, con la que se amplían las cuantías de los subsidios y los colectivos beneficiarios y se establecen una serie de reglas para compatibilizar el subsidio o la prestación contributiva de paro con un puesto de trabajo.
NOVEDADES DE LA REFORMA
La reforma del subsidio por desempleo que finalmente ha salido de la mesa de diálogo social incorpora algunas novedades respecto a la que tumbó en enero el Congreso, entre ellas nuevas reglas para poder compatibilizar las ayudas por desempleo con un puesto de trabajo, aunque los detalles de esta compatibilidad todavía están por cerrarse.
De igual manera, esta reforma permitirá compatibilizar el subsidio asistencial con un empleo por un periodo máximo de 180 días, sin reducción de la cuantía.
La nueva reforma también mantendrá medidas incluidas en la anterior, como son la simplificación de los trámites administrativos para acceder al subsidio, con la eliminación del mes de espera para las personas que hayan agotado su prestación contributiva y quieran solicitar el subsidio.
Finalmente, se mantendrá en el 125% del salario mínimo interprofesional (SMI) la base de cotización para los subsidios de mayores de 52 años, frente a la rebaja que introducía la primera reforma y que motivaron el rechazo de Podemos a la misma al considerar que se recortaban los importes de la pensión futura.
MEJORA DE LAS CUANTÍAS Y PROTECCIÓN A MÁS COLECTIVOS
Respecto a las cuantías, la mejora que recogía la reforma no convalidada se mantiene en el nuevo texto que Trabajo ha propuesto a los agentes sociales, de manera que durante los 12 primeros meses de percepción se establecerán en tres tramos: el subsidio será del 95% del Iprem durante los primeros seis meses de cobro (570 euros mensuales con el Iprem actual); del 90% durante los siguientes seis meses (540 euros) y del actual 80% durante el resto de la duración de la prestación (480 euros).
Sin embargo, al subsidio podrán acceder ahora personas víctimas de violencia de género o sexual, así como emigrantes retornados, menores de 45 años sin cargas familiares y trabajadores eventuales agrarios de todo el Estado (unos 200.000, según cálculos sindicales).
Además, los trabajadores residentes en Marruecos que hayan desempeñado su última relación laboral en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, amparados por autorización de trabajo para trabajadores transfronterizos, podrán acceder a la protección por desempleo de nivel contributivo sin necesidad de acreditar residencia en España, siempre que reúnan todos los requisitos establecidos en la legislación aplicable y en las condiciones que se establezcan reglamentariamente.
La reforma elimina los subsidios parciales para quienes hubieran trabajado a tiempo parcial, pudiendo cobrarlos íntegros, al tiempo que permitirá que las personas con menos de 12 meses cotizados (que son los necesarios para acceder a una prestación contributiva) puedan acceder al subsidio, medida que beneficiará fundamentalmente a los jóvenes.
Se facilitará además el cumplimiento del requisito de insuficiencia de rentas para las personas que acceden al subsidio, al permitir el acceso tanto por insuficiencia de rentas personales como de la unidad familiar, alternativamente, y se ampliará la cobertura al permitir el acceso de las parejas de hecho a la unidad familiar.
Al mismo tiempo, se establece un régimen de compatibilidad entre los subsidios agrarios de Andalucía y Extremadura con los del Régimen General y, adicionalmente, se compromete una reducción de las jornadas reales requeridas para acceder a los primeros como consecuencia de la sequía.
La reforma permitirá también que aquellos que están cobrando subsidios puedan agotar sus prestaciones actuales y, posteriormente, pasar a incorporarse en el Ingreso Mínimo Vital (IMV), una pasarela de la que quedarán excluidas las víctimas de violencia de género y los emigrantes retornados, que se mantendrán en el subsidio.
Asimismo, se introduce como causa de suspensión del subsidio que los trabajadores fijos-discontinuos sean llamados a reiniciar su actividad y no se reincorporen a su puesto de trabajo, salvo causa justificada.
La reforma establecerá también un mecanismo de reserva de políticas activas de empleo para mayores de 52 años para destinar una parte de los fondos de empleo a estas personas (este año serán unos 630 millones de euros).