MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
La Unión General de Trabajadores (UGT) ha denunciado la proliferación de empresas que se están lucrando abonando anticipadamente los salarios a sus trabajadores, una práctica que han tachado de “ilegal” y de “estafa” a los empleados debido a que les ocultan el interés cobrado por este adelanto.
“En los últimos meses están surgiendo empresas, apps y webs que, bajo diferentes denominaciones como ‘salario en tiempo real’ o ‘salario bajo demanda’, están obteniendo un beneficio ilegítimo e ilegal aprovechándose del desconocimiento de los derechos que asisten a las personas trabajadoras”, han denunciado desde la organización sindical, que señala que dichas empresas ocultan a los trabajadores el “coste real” que se cobra, cuando este adelanto del salario es un derecho gratuito amparado por la legislación vigente.
Además, han destacado que estas empresas “no informan adecuadamente” del coste de cada transacción, que varía entre dos y tres euros por cada solicitud de adelanto de la nómina.
“Incluso llegan a afirmar, con una desfachatez rayana en el delito, que los trabajadores no tendrán que pedir un préstamo en caso de tener alguna urgencia o gasto imprevisto”, han denunciado desde UGT, que también han destacado que ocultar el coste que cobran supone un elevadísimo porcentaje de interés subyacente, especialmente para aquellos colectivos más vulnerables y precarizados.
ATENTAN CONTRA EL ARTÍCULO 29 DEL ESTATUTO DE LOS TRABAJADORES
Estos sobrecostes financieros, han apuntado desde UGT, atentan contra el artículo 29 del Estatuto de los Trabajadores. “El trabajador y, con su autorización, sus representantes legales, tendrán derecho a percibir, sin que llegue el día señalado para el pago, anticipos a cuenta del trabajo ya realizado”, han recordado desde el sindicato, que también han señalado que estos adelantos se regulan con mayor detalle en el convenio de aplicación, pero “en ningún caso” pueden suponer un coste adicional para la persona solicitante.
Por último, desde UGT han subrayado que esto es un ejemplo de “la peor cara” de la tecnificación de las relaciones laborales, “la digitalización la usura”, ocultado este abuso bajo un dispositivo electrónico y una transacción virtual. “Curiosamente, las empresas que comercializan estos productos obtienen milmillonarias rondas de financiación desde los mismos fondos de inversión que dan cobijo a lasplataformas digitales de reparto y cuidados”, ha sentenciado.