“Trump jugará con el gas como arma: o se lo compran a EEUU o freirá a aranceles a todos los países”
Diego Mateos, experto energético, comenta sobre el impacto de la imposición de sanciones a Venezuela, que afecta a empresas extranjeras como Repsol, señalando que a corto plazo esto provoca un aumento de los precios del petróleo. Sin embargo, a medio y largo plazo, la situación se moderará debido a las expectativas de que los países OPEC+ aumenten su producción, lo que equilibrará el mercado. Mateos también se refire a la política energética de Trump, destacando que el presidente de EE. UU. considera el sector energético como una pieza clave en sus políticas, particularmente en la negociación con Rusia sobre Ucrania y el control de infraestructuras energéticas. Subraya que Trump está utilizando su influencia para negociar la paz con Rusia, especialmente en términos de energía, y forzar un acuerdo favorable para los intereses de EE. UU.
En cuanto al impacto de las sanciones sobre las empresas estadounidenses, Mateos explica que compañías como Chevron también sufrirán las consecuencias, aunque asumirán los “daños colaterales”. A nivel de precios, destaca que el petróleo se ha disparado a corto plazo, pero que a medida que avance el año, los precios probablemente se desinflarán debido al aumento de la producción por parte de OPEC+.
Así mismo, hace énfasis en la necesidad de diversificar las fuentes de energía, ya que la dependencia del petróleo venezolano es limitada, especialmente por las diferencias en la calidad del crudo que se puede refinar en las refinerías europeas. En este contexto, el gas es otro factor clave en la política energética, y Trump ha insistido en que Europa debe comprar gas natural licuado (GNL) de EE. UU., en lugar de depender de Rusia.