“Trump le ha dado un gran golpe a Zelensky porque el conflicto en Ucrania está al límite”. Koldo
Koldo Salazar, analista internacional, ha destacado varios aspectos cruciales sobre la colaboración geopolítica entre Rusia y China y su impacto en la política exterior de Estados Unidos. Rusia y China están reforzando y estrechando sus lazos de colaboración geopolítica, expandiendo su relación más allá de las cuestiones comerciales y financieras hacia aspectos militares. Esta evolución es vista con preocupación por los Estados Unidos.
Destaca que históricamente, Estados Unidos ha mantenido una posición equidistante y vigilante en las costas opuestas a las suyas, con una atención especial a Europa y el Pacífico. Europa, como una región de imperios y grandes poderes inestables, ha sido escenario de múltiples guerras en los siglos XIX y XX. Esta inestabilidad ha llevado a Estados Unidos a estar particularmente atento a los acontecimientos europeos.
En cuanto a las amenazas, Salazar sostiene que Rusia, aunque tiene territorios tanto en Europa como en el Pacífico, representa una amenaza principalmente en Europa. Por otro lado, China es un problema grave para Estados Unidos debido a su creciente poder y los conflictos internacionales en los que está involucrada, incluyendo la situación en Taiwán y las disputas territoriales en el Mar del Sur de China.
En cuanto a las patrullas conjuntas entre Rusia y China, destaca que han generado nerviosismo en Estados Unidos, puesto que son vistas como una posible amenaza. Explica que los radares de diferentes países cubren áreas más allá de su espacio aéreo para detectar amenazas con antelación, y Washington ha interpretado la presencia de estas patrullas en su espacio de interdicción como una amenaza potencial.
Resalta que la colaboración entre Pekín y Moscú ha aumentado de manera preocupante para Estados Unidos, este incremento en la cooperación es especialmente peligroso en el contexto de la guerra en Ucrania y la presión ejercida por China sobre Taiwán y en el Mar del Sur de China. Una situación que se basa situación refleja una confluencia de intereses y poderes que desafían el orden diplomático y geopolítico diseñado por Washington para la región.
“Zelensky ha desempeñado un papel crucial en el conflicto con Rusia, simbolizando la resistencia y la determinación del pueblo ucraniano”, afirma Salazar. Además, destaca que su liderazgo ha sido clave para atraer apoyo internacional a Ucrania, obteniendo ayuda militar, económica y humanitaria de muchos países occidentales. Sin embargo, cree que enfrenta importantes desafíos tanto internos, como mantener la unidad y la moral del país, como externos, al gestionar relaciones con potencias occidentales y la constante presión de Rusia. Y, recalca que “Trump le ha dado un gran golpe a Zelensky porque el conflicto en Ucrania está al límite”.