El nuevo primer ministro británico, Keir Starmer, ha puntualizado que depende de Kiev decidir cómo utiliza los misiles Storm Shadow suministrados por el Reino Unido, sugiriendo que sus fuerzas podrían atacar objetivos dentro de Rusia, aunque ha añadido que la ayuda proporcionada era "para fines defensivos" y los misiles de largo alcance deberían “utilizarse obviamente de acuerdo con el derecho internacional humanitario, como es...