Vladimir Putin, en su primera visita a Corea del Norte desde el año 2000, ha asegurado que el acuerdo firmado entre ambos países garantiza que ambas partes se ayudarán mutuamente en caso de agresión a cualquiera de ellas. Además, el presidente ruso ha declarado que no descarta la posibilidad de que los dos países establezcan una cooperación técnico-militar. En las declaraciones a la prensa ofrecidas por los dos líderes, al término de una reunión de más de dos horas, Kim Jong-un ha asegurado que el acuerdo es “de naturaleza defensiva y pacífica”.
Ambos han coincidido en elevar las relaciones entre Rusia y Corea del Norte a otro nivel, con acuerdos económicos, políticos y militares. Putin asegura que los dos países defienden constantemente la idea de formar un nuevo orden mundial multipolar más justo y democrático; añade el presidente ruso que confía en que las negociaciones con Kim Jong-un ayudarán a fortalecer la seguridad en la región.
El líder norcoreano ha prometido apoyar “incondicionalmente” a Putin en la guerra de Ucrania. Además, se opone, al igual que su par ruso, a las sanciones derivadas de esta operación especial; aseguran que esas sanciones se han impuesto por motivos políticos y perjudican la situación geopolítica. Vladimir Putin ha instado al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas a revisar las sanciones impuestas a Corea del Norte, a instancias de Estados Unidos.
La visita no ha hecho sino constatar las buenas relaciones entre los dos países, que seguirán apoyándose mutuamente “como verdaderos amigos y buenos vecinos” a pesar de la presión internacional, ha declarado Putin.