Von der Leyen señala que el acuerdo permitirá a la UE “prepararse mejor para el próximo invierno”
BRUSELAS, 19 (EUROPA PRESS)
La vicepresidenta tercera del Gobierno y responsable de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha celebrado este lunes la respuesta común de la Unión Europea para acordar un tope de 180 euros el megavatio hora (MWh) en las compras de gas en la Unión Europea, un mecanismo de corrección que finalmente sale adelante con el apoyo de Alemania pese a sus reservas durante la negociación.
En declaraciones a la prensa tras el acuerdo, Ribera ha señalado que España ha logrado ganar apoyos durante el último año “complicado” para sacar adelante la medida, pero ha asegurado que nadie debe “apropiarse” de la decisión ya que es “una respuesta de todos” en la que ha primado el espíritu de “unanimidad, flexibilidad y solidaridad con quien lo pasa mal”.
La vicepresidenta tercera ha señalado que el tope de 180 euros MWh es “razonable” y “no es excepcional” a la hora de fijar un umbral máximo que los Veintisiete están dispuestos a pagar en los mercados internacionales. Según ha defendido, el acuerdo final permite un sistema “trabajado, seguro y que permite ser atractivos para mercados internacionales, sin mandar la señal de que estamos dispuestos a pagar cualquier precio”.
Ribera ha destacado el “enorme esfuerzo” de coordinación de la Presidencia checa del Consejo para encontrar un consenso entorno a un mecanismo tan relevante para intervenir los repuntes del precio del gas.
Como curiosidad, la delegación checa ha regalado al resto de ministros una sudadera con el logo de la Presidencia y el mensaje ‘Convocaremos tantos consejos de Energía como resulten necesarios’, que popularizó su ministro de Energía, Jozef Síkela. “Nunca en la historia hubo tantísimas reuniones”, ha valorado Ribera sobre el 12º encuentro de ministros del ramo del año, tres veces más de lo habitual, en el que finalmente se ha cerrado el tope al precio del gas.
Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha dado la bienvenida al acuerdo, asegurando que son decisiones que “permitirán a la UE prepararse mejor para el próximo invierno” y acelerar el despliegue de renovables.
POSICIÓN DE ALEMANIA
El mecanismo de corrección del mercado ha salido adelante por mayoría cualificada, solo con el voto negativo de Hungría en la votación final, mientras que Alemania ha terminado apoyando pese a sus reservas durante la negociación.
La responsable de Transición Energética ha valorado que medida de este calado no se tomen “al margen o en contra de Alemania”. “Decisiones de estas características no pueden ser tomadas dejando fuera actores muy relevantes de la economía e industria europea, sabiendo todos que para Alemania era un tema sensible (…) no debíamos tomar decisiones al margen o en contra de Alemania”, ha expuesto.
Tras la reunión, el ministro de Clima y Política Energética de Países Bajos, Rob Jetten, que ha optado, junto a Austria, por la abstención, ha mostrado su preocupación por el hecho de que el mecanismo vaya a entrar en vigor antes de finalizar el análisis de impacto en mercado, apuntando que para su país es importante que se hayan aclarado las salvaguardas para suspenderlo si fuera necesario.
“Me he abstenido porque creo que lo estamos haciendo en el orden equivocado. Tendríamos que haber realizado un análisis de impacto antes de poner en marcha el tope de precio”, ha recalcado, subrayando que los Estados miembros deben atajar la situación a través de las compras conjuntas de gas y el ahorro de la demanda.