MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha advertido de que si el Congreso no aprueba los decretos que se votarán hoy en sesión plenaria no sólo subirá el precio de la luz a partir de mañana, sino que se pondrán en riesgo más de 30.000 millones de euros en proyectos de energías renovables.
Ribera, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, ha asegurado que el Gobierno está “trabajando intensamente con todos los grupos parlamentarios” para sacar adelante estos decretos y ha avisado de que aquí no se trata “de negar el pan y la sal” al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, sino de avalar medidas “que van en beneficio de todos los ciudadanos y de la actividad económica”.
“Me parece que el diálogo en torno a estas medidas, una vez convalidados los decretos leyes, es perfectamente posible en su tramitación como proyectos de ley (…) La pregunta no es tanto cuánto se quiere fastidiar al presidente Pedro Sánchez, sino cuánto se quiere fastidiar al conjunto de los ciudadanos españoles si no se respaldan estas medidas”, ha subrayado.
Ribera ha explicado que si no se aprueban estos decretos, no sólo se pondría en peligro la recepción de fondos europeos, sino que también subirá desde mañana el precio de la luz y del transporte público y no aumentará la cuantía de las pensiones.
“Se generarían una serie de quebrantos en cadena que incluyen la puesta en riesgo de más de 30.000 millones de euros en proyectos en energías renovables que están en tramitación y que requieren una prórroga en los plazos en los que puedan acabar de presentar sus propuestas”, ha advertido.
La vicepresidenta tercera ha indicado que aún se está tiempo de convalidar estas normas y que el Gobierno “va a trabajar cada uno de los minutos que quedan hasta la votación para que las cosas salgan bien”.
“Lo que toca en estos momentos es una interpelación directa a cada uno de los diputados que con su voto decide si quiere o no respaldar medidas en favor del conjunto de los ciudadanos o negar el pan y la sal al presidente del Gobierno, que es una manera muy curiosa de entender el funcionamiento de la democracia en este país”, ha concluido.