MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El sector industrial ha puesto en valor la inteligencia artificial (IA) como “una oportunidad de transformación y de mejora económica y social” que las empresas “no deben dejar pasar”, y ha llamado a no verla como una “amenaza”.
En su participación en el III Foro Indesia, el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, consideró que la inteligencia artificial debe ser vista en esa “clave de oportunidad”, por lo que mostró su preocupación por esas visiones que apuntan a ella “como una amenaza”, buscando abordar en primer lugar su regulación. “Tenemos que regular, lógicamente, pero tenemos que pensar que es una oportunidad”, dijo.
Así, señaló que desde 2017 la energética tuvo clara su apuesta por la digitalización como una vía para ayudar en la transformación de la compañía y “mejorar la cuenta de resultados”, aplicándola así a todas sus áreas de negocios.
A este respecto, indicó que Repsol ha sido así capaz de aplicar la inteligencia artificial para optimizar la venta de pan en sus estaciones de servicio, donde suministra más de 14 millones de barras, “con un aumento del 16% de las ventas, o para mejorar su margen de refino por barril de petróleo, con un aumento en el flujo de caja de 70 millones de euros.
Por ello, invitó a “perder el miedo” a la inteligencia artificial, ya que se trata de una herramienta que “va de mejorar”. “Es una revolución, pero un poco diferente a otras que hemos tenido”, añadió al respecto, subrayando que se trata de un reto que es “un desafío” a las reglas con las que antes se ha trabajado.
“UNA ACELERACIÓN”.
En esta mismo sentido, el consejero delegado de Acerinox, Bernardo Velázquez, opinó que la inteligencia artificial, más que una revolución, representa “una aceleración” a ese proceso de digitalización en el que la sociedad ya estaba inmersa.
Recalcando la necesidad de “tener en cuenta en qué se aplican los datos y para qué se utilizan”, Velázquez vio la inteligencia artificial como “una oportunidad y un acelerador” que debe ser utilizada para ser “más productivos, más eficientes y anticiparnos a los problemas”.
Por ello, en un negocio como el de Acerinox que consiste en vender acero inoxidable a sus clientes, estimó que es una herramienta para mejorar la manera de servir ese producto “a tiempo y con buena calidad”.
Además, en lo que respecta a las pymes, Velázquez afirmó que la inteligencia artificial va a suponer una oportunidad, y “mucho más barata y mucho más rápida” de lo que fue para otras empresas, para mejorar su día a día en el negocio.
Mientras, el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, apuntó como la digitalización y la inteligencia artificial es un arma que puede contribuir a mejorar “la eficiencia a lo largo de toda la cadena de valor”, por lo que “es algo que no se debe dejar pasar y es un reto para todas las empresas estar ahí”, dijo.
“Hay que meterse sí o sí en la inteligencia artificial. Nosotros lo hacemos tanto para fuera en nuestro producto como para dentro. En nuestro producto en el mundo de la defensa hay que ser punteros y estar en primera línea tecnológicamente, quién no esté y no utilice inteligencia artificial no será puntero”, manifestó.