La ministra de Transportes asegura que la primera información que recibieron de la situación llegó a través de la maquinista
MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha asegurado este miércoles que “ni Adif, ni Renfe recibieron notificación alguna” sobre la situación de la vía que ocasionó el incidente de tren por el incendio de Bejís (Castellón).
En su comparecencia ante la comisión del ramo en el Congreso para explicar lo ocurrido en dicho suceso, la ministra ha hecho un relato del suceso vivido el pasado 17 de agosto en el tren de media distancia que une Valencia y Zaragoza y que salió a las 16.23 de la capital valenciana.
Según Sánchez, Adif autorizó la salida de este convoy sin tener conocimiento de ningún incidente en ninguna de las zonas por las que concurre la vía. De hecho, según ha relatado, “la primera comunicación” que Adif tiene de estos hechos “viene de la maquinista”, después de detectar una “intensa lluvia de ceniza y humo” cuando llevaba una hora de trayecto, a las 17.54 horas.
A esa hora, según ha apuntado la titular de Transportes, la maquinista detuvo el tren y comunicó la situación siguiendo el protocolo que, según ha explicado Sánchez, señala que el primero en detectar un incidente que afecte a las infraestructuras “debe comunicar al resto” de partes implicadas la situación para determinar las medidas a tomar.
En concreto, la maquinista se puso en contacto con el Centro de gestión del tráfico para preguntar si había algún incendio en las proximidades de la zona en la que se encontraba. Fue entonces, según a apuntado la ministra, cuando Adif tuvo la primera información de esta situación.
SITUACIONES “LÓGICAS Y COMPRENSIBLES” DE ALARMA
La maquinista comunicó entonces que iba a cambiar de cabina y retroceder hasta la estación anterior más cercana, según ha relatado Sánchez, antes de apuntar que desde el centro de gestión se le autorizó “de forma inmediata” esta maniobra.
Finalmente, el tren retrocedió hasta la estación de Caudiel en donde estaban ya movilizadas las fuerzas de seguridad y los servicios sanitarios para atender a los heridos ya que, tal y como ha apuntado la ministra, algunos pasajeros presentaban heridas ya que, “en el proceso de cambio de cabina” se produjeron en los vagones “situaciones lógicas y comprensibles” de alarma entre los pasajeros que pidieron abandonar el tren, a pesar de que la maquinista ya les había informado del retroceso.
Esta maniobra se vio retrasada porque algunos de los viajeros tiraron del freno de emergencia e intentaron abrir las puertas del convoy. Esto obligó a la maquinista, según ha explicado Sánchez, a “rearmar” el tren para iniciar su marcha (a las 18.20). Además, tuvo que ir “recogiendo” a la personas que habían abandonado los vagones e iban “corriendo en las inmediaciones de la vía” con destino Caudiel.
SE CUMPLIERON LOS PROTOCOLOS
En su intervención, la ministra ha defendido en varias ocasiones que tanto Adif, como Renfe “cumplieron con los protocolos establecidos”. En este sentido, ha insistido en que estos señalan que la primera parte que tenga conocimiento “de una alteración de las condiciones”, ya sean fuerzas de seguridad o administraciones, debe “avisar a la otra para activar los mecanismos y procedimientos”.
Sánchez ha indicado que no se había notificado ninguna incidencia en la zona y, de hecho, ha apuntado que el tren que realiza el mismo trayecto y que salió de Valencia a las 12.13 horas ese mismo día realizó su recorrido “sin anomalías ni complicaciones”.
Del mismo modo, ha defendido que la maquinista estuviera sola en el tren ya que, según ha explicado, la normativa española, que es transpuesta de la directiva europea en esta materia, determina que para la circulación de un tren solo es necesaria la presencia de un maquinista, excepto que no disponga de comprobación de puerta cerradas en cabina, no tenga megafonía para comunicación con los viajeros o en determinadas situaciones vinculadas a la infraestructura que, según ha precisado Sánchez, no se daban en este caso.
Aún así, ha señalado que su departamento tiene encima de la mesa “cambios legales” relacionados con la coordinación y comunicación en situaciones de emergencia, con una revisión del protocolo en materia de avisos de riesgo extremo o alto de incendios, el incremento de ejercicios de simulación, una mejor formación del personal, reforzar la información a los usuarios sobre la responsabilidad de los maquinistas y conceder a la tripulación el estatus de agentes de la autoridad, entre otras medidas.
De hecho, la ministra se ha mostrado abierta a que algunas de estas iniciativas se puedan incluir ya en la Ley del Sector Ferroviario que está en tramitación en la actualidad.
ATENCIÓN A LAS VÍCTIMAS
En cuanto a los usuarios afectados por este incidente, la titular de Transportes ha informado de que fueron atendidos en primera instancia en la propia estación de Caudiel y, posteriormente, uno de ellos fue trasladado en helicóptero al hospital valenciano de La Fe, mientras que una decena fueron evacuadas a distintos centros. Dos de ellos aún siguen hospitalizados.
Además, a 20 pasajeros se los recolocó en un autobús para que pudieran llegar a sus destinos finales, de forma que el tren quedó vacío hasta las 23.29 horas, cuando se subieron de nuevo los pasajeros que llegaron en autobús desde Teruel para continuar su viaje a Valencia.
Desde entonces, ha asegurado la ministra, Renfe ha mantenido el contacto con las víctimas a las que, además, ha facilitado un número de teléfono para cualquier necesidad. Además, se ha facilitado atención psicológica a quien lo haya solicitado y, de hecho, tres personas han sido atendidas en este sentido. Según Sánchez, dos de ellas ya han sido dadas de alta, mientras que una tercera permanece en seguimiento aunque evoluciona favorablemente.
También está en seguimiento la maquinista que, según ha informado la ministra, continúa de baja laboral tras el suceso.
Por otra parte, Sánchez ha explicado que el tren no ha sufrido daños importantes más que la rotura de una ventana y algunos daños estéticos. De hecho, ha apuntad que “tanto el sistema de ventilación como climático funcionaron correctamente”, incluyendo “el sistema de incendios” que no permitió que le humo entrara dentro del vehículo.