El presidente ruso, Vladimir Putin, ha ordenado a Gazprom que comience a rellenar sus instalaciones de almacenamiento de gas en Europa el mes que viene.
El anuncio televisado ha tenido un efecto inmediato sobre los precios a la baja, ante la expectativa de que los tan esperados suministros de gas ruso adicionales podrían estar pronto en camino. El gigante exportador ha recibido la orden de elevar las existencias en sus instalaciones de Alemania y Austria a partir del 8 de noviembre, cuando los almacenes nacionales estén llenos.
El anuncio, sin embargo, y según analiza Bloomberg, no significa necesariamente que Rusia ceda a las presiones para sacar a Europa de una crisis energética. Las reservas se almacenarán en las propias instalaciones de Gazprom y la medida se produce en un momento en que la producción rusa va a aumentar de todos modos.
Europa ha arrancado la temporada de calefacción con los inventarios más bajos en más de una década, ya que Rusia ha mantenido los suministros limitados, mientras que los cargamentos de gas natural licuado se redirigido a Asia para satisfacer la creciente demanda.