ALICANTE, 21 (EUROPA PRESS)
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha resaltado este martes el “esfuerzo” del conjunto del sector pesquero para cumplir los compromisos con el Plan de Gestión del Mediterráneo, en su segundo año de aplicación, lo que ha permitido “obtener resultados que apuntan en la buena dirección para la protección de los recursos pesqueros”.
Planas ha resaltado que España, además de aplicar el recorte de días de pesca, apuesta por aplicar “otras medidas” como la selectividad en las artes de pesca, con una implicación muy directa del ministerio, que ha destinado 500.000 euros a un proyecto piloto que se desarrolla con el Instituto Español de Oceanografía (IEO) y el CSIC, para fabricar redes de pesca específicas que permiten proteger a los alevines.
Por ello, el ministro ha considerado “necesario” un enfoque “integral” y que la Comisión Europea realice una “evaluación científica de las medidas ya implantadas”, para que “estas no se centren sólo en la disminución del esfuerzo pesquero”. Además, ha destacado la necesidad de tener en cuenta sus efectos socioeconómicos para minimizar el impacto sobre la viabilidad y supervivencia de la flota.
Así se ha referido en declaraciones a los medios en la sede de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), en Alicante, junto al comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca de la Unión Europea, Virgilijus Sinkevicius, donde se han reunido con representantes del sector, instituciones científicas y de organizaciones no gubernamentales para conocer la situación del Mediterráneo y la aplicación del plan de gestión.
“Estamos haciendo un esfuerzo colectivo muy importante, porque para que haya futuro tiene que haber peces, tiene que haber stocks biológicos sanos que permitan la actividad pesquera y que esta pueda tener lugar”, ha recalcado el ministro, quien ha reclamado “un esfuerzo de sostenibilidad para poder llevar adelante el conjunto de nuestra actividad”.
Asimismo, ha señalado que esa sostenibilidad implica que la actividad pesquera “pueda ser rentable” y que pueda continuar en el Mediterráneo y en España, puesto que es su “preocupación”.
También ha indicado que el Atlántico y el Mediterráneo ofrecen “particularidades pesqueras muy distintas” que configuran la potencia de España en esta actividad, y que comparten un mismo objetivo, como es “compatibilizar la mejora continua del estado de los recursos marinos con la actividad pesquera, sostenible y rentable”.
“España está firmemente comprometida con la mejora del estado de los recursos en el Mediterráneo, porque es consciente de la delicada situación en la que se encuentran los recursos”, ha señalado.
COLABORACIÓN
Así, ha explicado que el Gobierno ha apostado por un método de trabajo de estrecha colaboración entre la administración, el sector y la comunidad científica.
Planas ha reiterado que el plan plurianual comunitario para el Mediterráneo debe apostar por medidas equilibradas y con un enfoque integral, basadas en fundamentos científicos y con tiempo suficiente para evaluar los efectos de las ya aplicadas antes de decidir las nuevas actuaciones.
En todo caso, las medidas que se adopten deben tener en cuenta los efectos socioeconómicos y la viabilidad y supervivencia de la flota, ha reiterado. Por ello, ha recordado que España ha propuesto un plan de medidas complementarias en materia de veda y artes de arrastre más selectivas.
La pesca de arrastre es especialmente relevante en el Mediterráneo, con 580 embarcaciones que representan el 75% del total nacional. En global, la flota está formada por 2.279 buques, el 27% de la nacional, que en el año 2020 capturaron 69.958 toneladas de pescado, un 5% menos que en el ejercicio anterior.