MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha defendido que el regadío eficiente y sostenible “es más necesario que nunca porque aporta mayor estabilidad y garantía a la producción de alimentos”, según ha informado el Ministerio.
Así lo ha manifestado este jueves el ministro, que ha presidido la reunión constitutiva de la Mesa Nacional del Regadío y del Observatorio de la Sostenibilidad del Regadío, como órgano de cooperación, comunicación y participación entre las diferentes administraciones competentes en materia de agricultura y de aplicación del agua en regadío, y otras partes interesadas que facilite su gobernanza.
El ministro ha subrayado que el regadío es la “joya de la corona” del sistema agroalimentario español, por su capacidad de generar valor añadido y empleo, por situarse a la vanguardia en innovación y por fijar población en el medio rural. También ha apuntado que el gran reto de la agricultura de regadío es disponer de agua en el futuro, en un contexto de cambio climático que indica una reducción de los recursos hídricos disponibles de entre un 12% y un 40% antes de final de este siglo, según las regiones.
“Estos cambios nos obligan a actualizar y modernizar la gestión del agua en la agricultura, para lograr un uso más adecuado y eficiente de cada gota de agua”, ha asegurado.
En su intervención, el ministro ha destacado la “gran importancia” económica, territorial, social y ambiental del regadío que, con más de 3,8 millones de hectáreas, supone cerca del 23% de la superficie cultivada en España y genera dos terceras partes del valor de la producción vegetal.
Planas ha destacado que más de la mitad de la superficie regada en nuestro país es de riego localizado, lo que permite un uso “más eficiente” de este recurso. Además, España es líder en tecnologías de riego y tratamiento de aguas, que incluso se exporta a otros países.
Por otro lado, el ministro ha recordado que en el periodo 2021-2027 las iniciativas del Gobierno promoverán una inversión público-privada de más de 2.100 millones de euros, procedentes tanto de fondos nacionales como comunitarios, para modernizar unas 200.000 hectáreas de regadío, que van a beneficiar a más de 20.000 regantes.
También se va a actuar sobre unas 500.000 hectáreas ya modernizadas, para introducir las últimas tecnologías que hagan más eficiente el regadío. Las actuaciones previstas van a garantizar un ahorro de agua de en torno al 10% respecto a la situación de partida y un uso más eficiente de la energía.
Estas inversiones incluyen obras de modernización de regadíos encargadas a Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa) en el marco del Plan de Recuperación, que suman 703 millones de euros de inversión, las incluidas en el convenio ordinario entre el ministerio y esta sociedad, con 433 millones de euros; así como las que se realizan a través de la ampliación de capital social de Seiasa, con cargo a los Presupuestos Generales del Estado, dotadas con 60 millones de euros.
También se recoge la modernización de regadíos con los nuevos fondos del Perte Agroalimentario, con una inversión de 512 millones de euros; e inversiones ordinarias de modernización y transformación de regadíos, financiadas por el ministerio dentro de los Presupuestos Generales del Estado, con 419 millones de euros.
El titular del ramo ha puntualizado que España ha conseguido que el Plan Estratégico para la aplicación de la Política Agraria Común (PAC) permita cofinanciar las inversiones en regadíos sostenibles. De esta forma, el Ministerio tiene previsto una intervención supraautonómica para modernización de regadíos con más de más de 29 millones de asignación del Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader), que se suma a las intervenciones que tienen programadas las comunidades autónomas en este ámbito.
Por otra parte, el ministro ha anunciado que el proyecto de ley para la aplicación de la nueva PAC en España a partir del próximo 1 de enero, que hoy tiene previsto aprobar el Congreso de los Diputados, va a incluir la posibilidad de contratar dos potencias eléctricas diferentes en un mismo año. Esta iniciativa da respuesta a una reivindicación de las comunidades de regantes que va a contribuir a paliar el incremento de los costes energéticos.