El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, declaró este martes que la alianza ha indicado previamente que “es mejor no imponer restricciones” al uso de los sistemas de armas entregados a Ucrania. Sin embargo, subrayó que cada estado miembro tendrá la última palabra sobre si permite a Ucrania utilizar armas de largo alcance para atacar objetivos en territorio ruso. Estas declaraciones se producen tras la confirmación de que Ucrania utilizó misiles balísticos ATACMS, suministrados por Estados Unidos, en ataques en suelo ruso, marcando un nuevo capítulo en el conflicto.
En una intervención previa al Consejo de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, Rutte destacó la necesidad de incrementar el apoyo a Ucrania, citando el respaldo militar y económico que Rusia recibe de Corea del Norte, China e Irán. “Debemos garantizar que Putin no triunfe y que Ucrania prevalezca”, afirmó con firmeza. Asimismo, resaltó la estrecha colaboración entre la OTAN y la UE para reforzar la capacidad de la industria de defensa en los próximos meses. Este esfuerzo tiene como objetivo reponer los arsenales y garantizar la preparación frente a cualquier adversario, especialmente a la luz de la nueva doctrina nuclear de Rusia, que contempla una posible respuesta nuclear incluso ante ataques convencionales.
Poco después de las declaraciones de Rutte, el ministro de Defensa de los Países Bajos, Ruben Brekelmans, anunció el envío de nuevos sistemas de defensa aérea a Ucrania, con un valor estimado de 88 millones de euros. Además, reveló planes para desarrollar tecnología avanzada en drones como parte del esfuerzo conjunto para apoyar a Kiev. En su intervención durante la reunión de ministros de Defensa de la UE en Bruselas, Brekelmans enfatizó la creciente amenaza que representa la participación de soldados norcoreanos en el conflicto, una situación que describió como “una nueva escalada”. Añadió que esta colaboración se suma al respaldo que Rusia recibe de Irán, China y Bielorrusia.
“Ucrania necesita desesperadamente sistemas de defensa aérea para hacer frente a las amenazas crecientes”, destacó Brekelmans. Hasta la fecha, los Países Bajos han entregado equipamiento militar por un valor acumulado de 3.800 millones de euros.
En el marco del milésimo día de la invasión rusa, los líderes de la Unión Europea reiteraron su apoyo incondicional a Ucrania. Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, envió un mensaje en vídeo a través de la plataforma X, en el que calificó a Europa como “un verdadero amigo” de Ucrania. Von der Leyen prometió que la UE continuará respaldando a Kiev “todo el tiempo que sea necesario”. “Pueden estar seguros de que el apoyo europeo y occidental seguirá fluyendo”, aseguró.
Por su parte, el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, reflexionó sobre el papel fundamental del apoyo a Ucrania durante su mandato, reconociendo que los esfuerzos han sido insuficientes hasta ahora. “La Unión Europea seguirá aumentando su respaldo para garantizar la victoria de Ucrania y restaurar la paz en nuestro continente”, señaló en un comunicado difundido en X.
Estas declaraciones reflejan la unidad de Occidente frente a la agresión rusa, mientras Ucrania continúa resistiendo con el apoyo de sus aliados. La utilización de los misiles ATACMS y el fortalecimiento de las capacidades defensivas de Kiev marcan un punto de inflexión en el conflicto, subrayando la escalada de tensiones en un contexto internacional cada vez más polarizado. Con nuevos compromisos financieros, tecnológicos y militares, Europa y la OTAN buscan mantener la presión sobre Moscú y garantizar que Ucrania tenga las herramientas necesarias para prevalecer en la guerra.