MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
Neoelectra ha lamentado que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico incumpla por “cuarta vez” desde 2021 sus compromisos en la regulación del sector de la cogeneración.
En un comunicado, el grupo indicó que ello está generando “una situación insostenible, con un marco regulatorio incierto que condiciona ya no solo la viabilidad del sector, sino también las inversiones en tecnologías como el biogás o el hidrógeno verde de las empresas cogeneradoras que prestan servicio a la industria”.
El consejero delegado de Grupo Neoelectra, Antonio Cortés, afirmó que “el retraso real de la regulación de la cogeneración se remonta a finales del año 2021”. “Es decir, hace más de dos años y medio, y está obligando a un gran número de plantas de cogeneración a detener su actividad”, añadió al respecto.
En Los Desayunos Informativos de Europa Press, la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, estimó este miércoles que la publicación por el Gobierno de la metodología de actualización de la retribución a la operación de las instalaciones de régimen retributivo específico de la cogeneración podría producirse “alrededor del verano”.
La compañía avisa de que el retraso de más de dos años supone que la cogeneración adelante cada mes en torno a 100 millones de euros, según cálculos del sector.
Además, recuerda que las subastas de 1.200 megavatios (MW) de cogeneración están pendientes desde diciembre de 2021 y que la situación actual obliga a algunas empresas manufactureras a “recurrir a tecnologías menos sostenibles como el fueloil y a renunciar a parte de la producción por el elevado coste energético de las alternativas disponibles”.
Así, Neoelectra advirtió de que, aunque la ministra transmitió que existen alternativas a la cogeneración, “la realidad es que, en este momento, no existe ninguna capaz de proporcionar energía térmica a grandes empresas industriales de manera eficiente y sostenible”.
De hecho, estimó que el retraso en la publicación de los parámetros regulatorios y en la convocatoria de las subastas de la cogeneración está influyendo “de manera negativa” en la reducción de las emisiones de CO2 por parte de la industria manufacturera que utiliza esta tecnología, “la única con capacidad para generar al mismo tiempo energía térmica y energía eléctrica, y compatible con energías renovables”.
“Cada vez que una empresa manufacturera tiene que recurrir al diésel o renunciar a producir electricidad, damos un paso atrás en el proceso de descarbonización y transición energética porque, además, esa electricidad ha de sustituirse por alternativas, que son menos eficientes para la industria”, destacó Cortés.
Igualmente, el directivo añadió que “la carencia de un marco regulatorio que garantice la estabilidad del sector está retrasando inversiones que podrían reducir de manera sustancial la huella de carbono”.