MUNDO EN GUERRA: Complicaciones para Ucrania, más tensión en Líbano y temor a una respuesta de Irán
En medio de la creciente tensión entre Israel y el grupo militante Hamás, así como en la frontera con Líbano, el secretario general de la ONU, António Guterres, ha expresado su oposición a cualquier tipo de invasión terrestre en Líbano. A pesar de su postura, Israel ha anunciado el inicio de una “invasión limitada”. En este entorno llama la atención el papel de la ONU, si no consigue parar la tensión internacional, para qué sirve. Y es que, la ONU no para de decir pero no hace nada.
Mientras que Turquía, a través de su presidente Erdogan, ha instado a la organización internacional a autorizar el uso de la fuerza si Israel no cesa sus ataques. En este entorno, Israel declara “zona militar cerrada” los alrededores de tres comunidades en la frontera con Líbano. A su vez, EEUU confirma que Israel le ha informado sobre operaciones militares en Líbano. Volviendo a la ONU, Josep Borrell, ha afirmado que “cualquier otra intervención militar agravaría dramáticamente la situación y tiene que evitarse”.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, ha manifestado que la situación en el frente de guerra se ha vuelto difícil. En un mensaje reciente, ha instado a sus tropas a hacer todo lo posible para resistir, subrayando la importancia de la ayuda de Occidente. Durante su discurso, Zelensky señaló que no se informará sobre los avances de la ayuda militar occidental hasta que los rusos lo hayan descubierto.
Por otro lado, Rusia ha planeado un incremento de casi un 25% en su presupuesto militar para 2025, a pesar de las previsiones que apuntan a una disminución de sus ingresos por gas y petróleo. Este ajuste en el presupuesto ruso, según ha informado el medio Bel, se debe a la expectativa de un precio más bajo para estas exportaciones.
La toma de posesión de Rut al frente de la OTAN que marcará el inicio de una nueva etapa en la organización, en un contexto geopolítico en constante cambio. Ayer, el presidente ruso, Vladimir Putin, acusó a las élites occidentales de haber preparado a Ucrania para un ataque a Rusia desde antes de la invasión, reafirmando la narrativa de conflicto que ha dominado la relación entre ambos países desde 2014.