LEBRIJA (SEVILLA), 1 (EUROPA PRESS)
La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, ha asegurado este viernes que “será duro” negociar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2023, que debe incluir el incremento del gasto en Defensa para alcanzar el objetivo de llegar a un 2% del PIB en 2029, compromiso alcanzado en la Cumbre de la OTAN en Madrid.
“Prepararemos unos Presupuestos que serán el primer paso para contemplar el objetivo de llegar al 2% en 2029”, ha afirmado Montero, quien ha relativizado la discrepancia con su socio de gobierno, Unidas Podemos, que ha rechazado esa aspiración de elevar el gasto militar. Así, ha indicado que “la negociación siempre es compleja, no sólo con los socios de gobierno, sino con todos los grupos políticos que tienen que apoyar un presupuesto”.
En Lebrija (Sevilla), con motivo de su asistencia a la presentación de la moneda conmemorativa en homenaje a Elio Antonio de Nebrija de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre y a la inauguración de un monumento a Nebrija, Montero ha esgrimido sobre esa negociación presupuestaria que el Gobierno ha demostrado en este período “diálogo, capacidad de acuerdo, consenso, son señas de identidad”, por lo que ha relativizado las dificultades parlamentarias para alumbrar el proyecto de Presupuestos de 2023.
“Hacía mucho tiempo que España no contaba con dos presupuestos consecutivos (los de 2021 y 2022)”, destacó Montero, quien ha añadido que “esa capacidad, ese entrenamiento nos permitirá confeccionar unos buenos presupuestos que permitan seguir haciendo frente a la inflación, que ojalá el año que viene se haya normalizado”.
En el esqueleto de ese proyecto de Presupuestos para 2023, Montero ha apelado a “compatibilizar los derechos sociales, las pensiones, la sanidad, la educación, la vivienda, la inversión” con ese nuevo añadido de la apuesta por la seguridad, convencida de que “España cumple con el conjunto de los socios” para invocar la aspiración de que esa inversión en defensa sea “disuasoria” de cualquier intento que afecte a la integridad territorial de España.
En cuanto al gasto en defensa, Montero ha recordado que “el presidente lo ha dicho con claridad, lo ha reafirmado en esta Cumbre de la OTAN, ya lo había anunciado previamente, el compromiso de aquí a 2029 de la capacidad de llegar al 2% del PIB, una cifra que los aliados han estimado conveniente para reafirmar la seguridad”.
A juicio de la ministra de Hacienda, el objetivo de aumentar el gasto militar responde a que se trata de que “todos los países” se sientan seguros, con el argumento de que “los ataques tienen muchas vertientes, formatos, no solamente la parte armada, la visible, que crea más pérdidas de vida”, para apuntar entonces otros riesgos asociados a la seguridad como “las amenazas de ciberseguridad o hacerse con el control de datos de ciudadanos”.
Por ello, Montero ha apelado a “recuperar la inversión” en defensa al sostener que “ha ido cayendo de forma considerable”, mientras ha insistido en que esa apuesta conjunta de la OTAN “tiene que permitir a todo los países ofrecer seguridad, la salvaguarda de los valores democráticos, de la integridad territorial, de la palabra, diálogo, valores democráticos que se han puesto en cuestión con esta invasión”.