Meta Platforms Inc. está desarrollando un ambicioso proyecto para instalar un cable submarino de fibra óptica que conectará varias regiones clave del mundo. Según informó TechCrunch este viernes, el proyecto, valorado en más de 10.000 millones de dólares, será propiedad exclusiva de Meta, lo que la convertirá en el único usuario de esta infraestructura.
El proyecto, que aún se encuentra en fase de planificación, tardará años en estar plenamente operativo, según fuentes familiarizadas con el tema. El cable comenzará en la costa este de Estados Unidos, atravesará Sudáfrica, India y Australia, y concluirá en la costa oeste del país norteamericano, formando una ruta que asemeja una “W” alrededor del globo. Se espera que Meta revele detalles más concretos sobre la ruta, capacidad y objetivos del cable a principios de 2025.
Sunil Tagare, experto en cables submarinos, fue el primero en dar a conocer los planes de Meta en octubre. Tagare explicó a TechCrunch que el presupuesto inicial ronda a los 2000 millones de dólares, pero se anticipa que supere los 10.000 millones después de unos años de trabajo.
Una vez finalizado, este cable permitiría a Meta gestionar de forma exclusiva su tráfico de datos a nivel global, mejorando la calidad del servicio para sus usuarios. Además, la infraestructura garantizaría la entrega directa de contenido, publicidad y otros servicios en los mercados internacionales, una estrategia crucial considerando que Meta genera más ingresos fuera de Norteamérica que en su mercado local.
Meta y el sector de los cables submarinos
Este proyecto subraya cómo los gigantes tecnológicos están transformando la industria de cables submarinos, una esfera tradicionalmente dominada por consorcios de operadores de telecomunicaciones. Según Telegeography, Meta ya es copropietaria de 16 redes submarinas existentes, incluida 2Africa, un cable que rodea el continente africano y cuenta con socios como Orange, Vodafone, China Mobile, MTN, entre otros.
La propiedad exclusiva de la ruta y el cable le daría a Meta prioridad en la capacidad, optimizando la entrega de contenido y garantizando la estabilidad del tráfico. Además, la empresa planea evitar zonas de tensión geopolítica, como las afectadas por conflictos recientes, donde cables submarinos han sido dañados. Un ejemplo destacado fue el corte de un cable en el mar Báltico, que algunos países atribuyeron a acciones de Rusia.
En última instancia, el cable representa una apuesta estratégica de Meta para consolidar su presencia global, asegurar la calidad de sus servicios y proteger su infraestructura frente a riesgos externos.