Giorgia Meloni, primer ministra italiana, ha declarado este lunes que “el intento constante de demonizar” a los votantes de derechas está perdiendo impacto a nivel global.
Esta estrategia, según Meloni, es un truco en el que cada vez caen menos personas, a tenor de los resultados que se vienen produciendo de un tiempo a esta parte en toda Europa y otras partes del mundo.
Estas declaraciones se producen después de la aplastante victoria del Frente Nacional de Marine Le Pen en la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Francia.