MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha asegurado este jueves que el Gobierno está trabajando para analizar el impacto de la decisión de Argelia de suspender el Tratado de Amistad con España y ha señalado que el objetivo es evitar “represalias” y “recuperar la normalidad”.
“Estamos analizando el documento que recibimos ayer; es muy pronto para hacer una valoración del impacto y desde luego lo más importante es recuperar la normalidad en la relación con Argelia. Ese es el principal objetivo, que sea algo puntual, y por lo tanto, en eso estamos trabajando, para que no tengamos que tomar ninguna medida de represalia”, ha afirmado la ministra a preguntas de Europa Press tras participar en el III Foro Internacional ‘Expansión’.
En esa línea, la titular de la cartera de Industria ha subrayado que Argelia es “un país vecino” con el que España mantiene intereses comerciales “importantes”, por lo que, además de analizar el impacto de la decisión del país africano, también se está “tratando de defender el interés de España” y de sus empresas.
También ha valorado que, a pesar de las incertidumbres del contexto internacional debido a la guerra de Ucrania y tras la pandemia del Covid-19, actualmente el comercio exterior está “muy activado”.
“Hemos sabido gestionar estas incertidumbres, protegiendo el comercio exterior español, que es muy pujante, y esperamos ser eficaces en las decisiones y preservar un comercio internacional que está siendo una de las palancas de nuestro crecimiento económico”, ha añadido Maroto.
Argelia anunció ayer la suspensión del Tratado de Amistad con España, después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confirmara en sede parlamentaria su giro respecto al Sáhara, lo cual se prevé que tendrá importantes repercusiones en términos económicos y comerciales.
En concreto, el capítulo dos del Tratado, que se firmó en 2002, contempla la cooperación económica y financiera, comprometiéndose España y Argelia a impulsarla y reforzarla con el fin de procurar la dinamización y modernización de la economía argelina mediante un impulso de las inversiones recíprocas. Para ello, preveían impulsar los contactos entre los sectores productivos y de servicios de ambos países, así como los proyectos de inversión y las sociedades mixtas.
Entre los ámbitos de cooperación económica se precisó con especial atención el de los proyectos de infraestructura, particularmente en los campos de la energía, obras públicas y viviendas, transportes y comunicaciones, pesca marítima, protección del medio ambiente y gestión de recursos naturales.
En este contexto, el 90,7% de las importaciones españolas a Argelia se concentran en los combustibles, aceites y minerales, un rubro que en el primer trimestre del año alcanzó los 1.623,9 millones de euros, según los datos de Datacomex, que depende del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo recogidos por Europa Press.
De hecho, según los datos de Enagás, Argelia es en estos momentos el segundo proveedor de gas a España, solo por detrás de Estados Unidos, que superó al país africano como principal suministrador de esta materia prima a comienzos de este año.
Además, España se juega casi 300 millones de euros en ventas para las empresas nacionales que exportan alimentos y bebidas a Argelia, según los datos de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB).