MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
Los costes totales para las pymes aumentaron un 23,3% interanual en el tercer trimestre de 2022, mientras que las ventas solo se incrementaron un 14,3%, acentuando el efecto de la inflación sobre las empresas españolas, según ha publicado la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) en el Indicador sobre la Situación de la Pyme.
Además, el ritmo de crecimiento nominal de las ventas en el tercer trimestre fue menor al registrado en la primera mitad del año, que llegó a alcanzar el 18,2%.
Con esto, y descontando el efecto de la inflación, el volumen de ventas de las pymes cayó un 1,2% interanual en los meses veraniegos del año pasado, frenando la tendencia alcista de las ventas que se venía acumulando desde mediados de 2021.
Hasta agosto, los costes de las pymes acumularon un incremento del 37,2%, mientras las ventas solo crecieron un 23,3%, provocando una reducción de los márgenes de beneficio y la “pérdida de competitividad” de las pequeñas y medianas empresas.
LOS COSTES LABORALES SE DISPARAN UN 5,7%
Los costes laborales registraron el mayor incremento durante el tercer trimestre de 2022, disparándose un 5,7%. El efecto fue más acentuado sobre las pequeñas empresas, que afrontaron costes un 6,6% superiores a los del año anterior, frente la subida del 3,7% que experimentaron las medianas empresas.
El coste de los servicios contratados por las pymes españolas también creció, hasta un 2,8% interanual. Los transportes (32,4%), los envíos por mensajería (11,2%) y los estudios de mercado (6,2%) fueron los que registraron un mayor incremento.
El precio de la energía presentó un aumento cercano al 100% interanual en el tercer trimestre de 2022, mientras los bienes intermedios costaron un 20,2% más que en las mismas fechas del año anterior.
MENOR RENTABILIDAD Y RESTRICCIONES AL CRÉDITO
La rentabilidad neta sobre el activo (ROA) se situó en el 3% para las pequeñas empresas en el tercer trimestre, aún por debajo de los niveles que se registraban antes de la pandemia (3,5% en 2019). Para las medianas empresas, la rentabilidad fue tres décimas superior a la de 2019, alcanzando el 4,5%.
Sin embargo, desde Cepyme han recordado que “la rentabilidad podría estar acusando el efecto distorsionador de la inflación, que puede hacer que los beneficios contables parezcan crecientes, en términos de euros, aunque los márgenes se reduzcan”.
La inflación y el incremento de los tipos de interés, que para las nuevas operaciones de crédito para pymes se situó en el 1,99% en el tercer trimestre de 2022, ha dificultado a estas empresas la cobertura de sus necesidades de financiación.
LA PEQUEÑA EMPRESA, LA MÁS AFECTADA
Las ventas de las empresas pequeñas en el tercer trimestre fueron un 3,8% inferiores a las registradas en 2019, antes de la pandemia, mientras que las de las empresas medianas solo se contrajeron un 0,8%. Además, los costes totales también aumentaron más para las pequeñas compañías (25,8%) que para las de mediano tamaño (20,3%).
El indicador de Cepyme también ha reflejado un menor ritmo de creación de pequeñas y medianas empresas, pues estas solo aumentaron un 1% interanual en el tercer trimestre de 2022, el menor incremento de los últimos seis periodos. El número de pequeñas compañías creció un 0,9%, mientras que las medianas se multiplicaron un 5,2%.
Mientras en el tercer trimestre se registraban 1.770 empresas medianas más que hace cuatro años (un incremento del 7,2%), se computaron 7.200 empresas pequeñas menos (-0,6%). El tamaño medio de las pymes también se redujo, situándose la media en 7,8 asalariados por compañía.
Ante esta situación, Cepyme ha solicitado que no se incrementen más los costes de las empresas y pide al Gobierno “cautela” en la toma de medidas para no perjudicar más al tejido empresarial.