La última ola de la pandemia y la guerra en Ucrania son las principales amenazas para la mejora de la cadena logística
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
Las tensiones en la cadena de suministro se han vuelto más persistentes y “profundamente arraigadas” de lo que se esperaba hace algunos meses”, según el último informe ‘Cadenas de suministro globales: Las complejidades se multiplican’, publicado por la institución financiera Citi GPS.
En un estudio anterior, titulado ‘El complicado camino de regreso a la normalidad’, Citi indicó que las condiciones en la cadena de suministro eran “remarcablemente ajustadas”, pero se veían razones para creer que la situación podría mejorar a lo largo de 2022.
“Esperábamos una mejora en el envío y la logística durante la primera parte de 2022 a medida que se revirtieran las presiones estacionales asociadas con la elevada demanda del cuarto trimestre, se tomaran medidas para desatascar los puertos y los precios del petróleo comenzaran a moderarse”, han explicado.
Sin embargo, dos “sorpresas”, como la última ola de la pandemia de la Covid-19 y el estallido en la guerra en Ucrania han llevado a la institución a cambiar sus previsiones de cara a la segunda mitad del año.
Así, la variante ómicron ha puesto de nuevo en riesgo la cadena de suministro y se han mantenido los bloqueos en curso, “debido principalmente al aumento de casos en China”. Por otro lado, “y aunque todavía no se han determinado sus implicaciones”, el conflicto en Ucrania ha abierto una “nueva etapa” en la cadena logística.
En este sentido, la entidad aprecia “riesgos inquietantes” que se derivan del papel “fundamental” que tienen los dos países en guerra como exportadores de productos básicos y materias primas. El conflicto parece “estar amplificando aún más las tensiones”, con especial atención en los sectores de los metales y minerales, la industria, el sector automovilístico, el tecnológico y el de la alimentación.
Dadas estas realidades, desde Citi han concluído que cualquier esperanza de mejora a corto plazo “se ha hecho añicos”, destacando que los desafíos en los próximos meses parecen ser tan agudos como en cualquier otro momento en los últimos dos años.