MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
Las fusiones y adquisiciones corporativas en el primer trimestre del año subieron un 11% a escala global en comparación con el mismo periodo de 2023, a pesar de que el sector en Europa ha experimentado un rendimiento inferior en el resultado de sus inversiones, según la investigación publicada este martes del Quarterly Deal Performance Monitor (QDPM) de WTW.
En concreto, el estudio ha revelado que en el periodo enero-marzo de 2024 se llevaron a cabo 166 operaciones en todo el mundo frente a las 150 operaciones cerradas en ese mismo periodo de 2023.
Además, se cerraron cinco grandes operaciones -las valoradas en más de 10.000 millones de euros-, frente a una en los tres primeros meses del año pasado, por lo que, para los firmantes del estudio, este segmento da señales de estabilización tras trimestres de caídas.
Con todo, el estudio ha enmarcado que, frente a un desarrollo generalizado al alza de los mercados bursátiles, las empresas que cerraron operaciones de fusión y adquisición valoradas en más de 100 millones de euros entre enero y marzo de 2024 obtuvieron unos rendimientos inferiores a los del mercado en un 13%.
A pesar de estas cifras, la tendencia a largo plazo de más de 15 años sugiere, según el estudio, que las operaciones de fusiones y adquisiciones han superado al mercado desde la crisis financiera global con un margen del 1,5%.
Del lado de Europa, que ha completado en el primer trimestre un total de 37 operaciones, se ha anotado un rendimiento inferior en un 9% en el rendimiento de las inversiones en fusiones y adquisiciones.
Entrando al detalle, la responsable del área de riesgos transaccionales de WTW, Victoria Lebed, ha matizado que el sur de Europa y España en particular “siguen en el foco” de los inversores tanto extranjeros como nacionales, aunque “los procesos llevan más tiempo en completarse”, en tanto que sí han constatado un aumento de actividad en diferentes sectores.
En ese sentido, se ha expuesto que la tendencia es común en Norteamérica (ambas regiones presentan todavía elevados tipos de interés que restan atractivo para que las compañías hagan este tipos de operaciones), pero no en la región de Asia-Pacífico, que muestra un rendimiento más robusto.