MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
La compañía aérea brasileña Azul se ha disparado más de un 53% en la Bolsa de Valores de Sao Paulo tras informar este lunes que había reducido un 71,1% sus pérdidas en el año 2022, hasta los 1.379 millones de reales brasileños (249 millones de euros).
Así, las acciones de Azul han arrancado la semana con un incremento del 17% en la apertura de la sesión, hasta repuntar al 53% en la media sesión. Pese a este fuerte impulso, el índice bursátil brasileño crecía un tímido 1,07%.
Uno de los datos que más han atraido a los inversores ha sido la recuperación de los niveles de ingresos previos a la pandemia, un 40% por encima con respecto al año 2019, alcanzando la cifra de los 15.948 millones de reales (2.880 millones de euros).
Además, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 3.230 millones de reales (583 millones de euros), duplicando la cifra del año 2021.
Estas cifras, según han explicado posteriormente desde Azul en la conferencia de presentación de resultados, son “muy impresionantes”, ya que los precios de los combustibles se han duplicado respecto al año 2019 y la moneda brasileña se ha devaluado un 30%.
“A diferencia de otras compañías aéreas de Estados Unidos o Europa que han recibido subsidios, en Azul no recibimos ningún apoyo del Gobierno durante estos tiempos complicados. Sin embargo, hemos sido capaces de obtener unos resultados sólidos, fruto de nuestro propio desempeño”, han destacado.
De cara al cierre de 2023, la compañía espera haber recuperado al 100% su negocio internacional ante la elevada demanda actual. En este sentido, el consejero delegado de Azul, John Rodgerson, ha mostrado su optimismo de cara al año 2023, amparado por la fuerte recuperación de la demanda y el aumento de la oferta de rutas y de la capacidad de sus aviones.
En términos financieros, el objetivo para 2023 es llegar a la cifra récord de 20.000 millones de reales (3.610 millones de euros) en ingreos y a los 5.000 millones de reales (902,7 millones de euros) de Ebitda, una cifra superior en un 40% a la registrada en 2019.