MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
La Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) ha pedido a la Asociación Española de Banca (AEB) un “mayor compromiso” con el protocolo firmado por las entidades para mejorar la atención a las personas mayores, según ha afirmado a través de una nota de prensa.
La PMP se ha reunido con la presidenta de la AEB, Alejandra Kindelán, para valorar los avances en la aplicación del ‘Protocolo Estratégico para Reforzar el Compromiso Social y Sostenible de la Banca’, firmado el pasado mes de marzo por las principales patronales bancarias en el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
Durante el encuentro, la plataforma ha recordado a Kindelán el compromiso del sector de ir aplicando “una buena parte de las medidas” contenidas en el protocolo en el primer plazo de seis meses, de manera que en el primer informe que emitirá el Observatorio de Inclusión Financiera pueda comprobar que las entidades bancarias están cumpliendo buena parte de los compromisos adquiridos.
En este sentido, el presidente de la PMP, Ángel Rodríguez Castedo, y el secretario general de la PMP, Miguel Ángel Cabra de Luna, también le han presentado los resultados de un sondeo realizado entre sus asociados, el cual pone de manifiesto que, en general, la percepción de los usuarios es que “todavía se producen múltiples carencias e incumplimientos en la atención a las personas mayores”.
Además, no se estaría produciendo una “aplicación homogénea” de los principios y medidas contenidos en el protocolo. “Una misma entidad bancaria ofrece servicios distintos en función de sus sucursales, dándose el caso de que la calidad de atención de la misma entidad es diferente en función del barrio o de la localidad”, sostiene la organización.
Por último, la PMP ha trasladado los “problemas y dificultades” que han reportado los usuarios “en numerosos casos”; como la falta de mejoras en la atención telefónica; la “no aplicación, en muchos casos”, de la ampliación horaria de atención personalizada; la “ausencia” de personal de apoyo para el manejo de cajeros automáticos; la necesidad de cita previa, “aunque se trate de una persona mayor”, entre otros.