MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) estima que el impacto del posible ‘default’ de la promotora inmobiliaria china Evergrande en los mercados financieros será “limitado” por las interconexiones entre el país asiático y el resto del mundo.
“La conexión entre los mercados financieros de China y otros mercados financieros es mucho menor de la que vemos en el mundo occidental, como la forma en la que están conectados Estados Unidos, Reino Unido y Europa, por lo que el impacto debería ser bastante limitado excepto, obviamente, para algunas compañías”, ha explicado la economista jefa de la OCDE, Laurence Boone, a preguntas de los periodistas durante la rueda de prensa en la que presentaba las nuevas perspectivas económicas del organismo.
Según Boone, las autoridades chinas tienen la capacidad “monetaria” y “fiscal” para amortiguar cualquier posible impacto de la quiebra de Evergrande.
Este martes, el club de países ha revisado las perspectivas de crecimiento económico de las principales economías avanzadas. En el caso de China, la OCDE ha dejado sin cambios sus proyecciones de PIB, que se sitúan en el 8,5% para 2021 y en el 5,8% para 2022.
De acuerdo con las cuentas del primer semestre de 2021, las últimas que ha presentado el grupo, Evergrande registró un beneficio neto de 10.499 millones de yuanes (1.389 millones de euros), un 28,9% menos que en el mismo periodo de 2020. De su lado, los ingresos se contrajeron un 16,5%, hasta 222.690 millones de yuanes (29.351 millones de euros).
Pese a los beneficios registrados, los problemas de China Evergrande se deben a su manejo del balance. A 30 de junio, la promotora contaba con unos activos valorados en 2,377 billones de yuanes (313.288 millones de euros). De esa cifra, 1,278 billones (168.440 millones de euros), casi el 54%, eran proyectos inacabados, mientras que únicamente 144.514 millones (19.047 millones de euros) eran inmuebles finalizados y en venta.
Además, Evergrande cerró el primer semestre con efectivo y equivalentes de efectivo por valor de 86.772 millones de yuanes (11.437 millones de euros), un 45,3% menos que un año antes. De su lado, el pasivo total de la firma era de 1,966 billones de yuanes (259.119 millones de euros), de los cuales 571.775 millones (75.360 millones de euros) eran préstamos y 951.133 millones (125.359 millones de euros) eran cuentas a pagar a proveedores.