MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
Enisa ha destinado más de 17 millones de euros en 2022 a financiar más de un centenar de proyectos digitales a través de la línea de apoyo al emprendimiento digital femenino, que dedicará hasta 51 millones de los fondo Next Generation a romper la brecha de acceso a financiación de emprendedoras.
La línea ENISA Emprendedoras Digitales está dirigida tanto a empresas de nueva creación como aquellas que estén considerando un proyecto de consolidación, crecimiento o internacionalización. La puesta en marcha de esta línea tiene como objetivo favorecer los proyectos empresariales promovidos por una o varias mujeres que ostenten una posición relevante de liderazgo o de poder dentro de la sociedad: en el accionariado, en el órgano de administración o formando parte del equipo directivo.
Entre las empresas que han logrado obtener un enisa en 2022 a través de la línea Emprendedoras Digitales se encuentran PlayFilm, Freeme, BCome, eAgora Algorisme del Canvi o Lekkid, entre otras, muestra de algunos de los casos de emprendimiento femenino financiados por ENISA en sus etapas iniciales o en sucesivas fases de expansión, según ha difundido el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital este miércoles.
Estas empresas están centradas en el desarrollo y comercialización de herramientas tecnológicas innovadoras como las que, perteneciendo a cualquier sector (no necesariamente tecnológico), estén inmersas en un proceso de adaptación a las nuevas tecnologías, con el objeto de mejorar o aumentar su competitividad y eficiencia, que podrán contar con la financiación necesaria.
El instrumento financiero, financiado por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital y gestionado a través de ENISA, es el préstamo participativo, con importes entre los 25.000 y 1.500.000 de euros, que no exige más garantías que las del propio proyecto empresarial y un equipo gestor solvente. Las empresas deben tener su domicilio social en España y presentar proyectos empresariales viables técnica y económicamente, así como tener un modelo de negocio innovador, novedoso o con claras ventajas competitivas.
Como señala el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, la realidad es que la participación de mujeres en empresas emergentes de base tecnológica es aún baja. Según los últimos datos recabados en el Mapa de Emprendimiento 2022, un 18% de las start-ups tecnológicas han sido fundadas por mujeres, aunque estas últimas fracasan menos que las fundadas por hombres (27% frente al 59%).