MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
La inversión y la demanda de servicios de inteligencia artificial (IA) en el sector manufacturero crecerá un 40% en los próximos tres años, según la firma de software empresarial IFS, que también considera que 2024 será “determinante” para la adopción de esta tecnología para “mitigar la volatilidad del mercado” y lograr una “diferenciación competitiva”.
“Este crecimiento se reflejará especialmente en el gasto en IA dentro del gasto en tecnologías de la información. La IA analizará datos de producción en tiempo real, identificando patrones y anomalías. El reconocimiento de patrones de datos proporcionará a los fabricantes un análisis continuo de la causa raíz, agilizando el trabajo y prediciendo posibles problemas de calidad del producto”, ha subrayado el responsable de preventas de IFS, Gonzalo Valle.
La compañía también prevé que en un periodo de entre dos y cinco años los fabricantes adoptarán este tipo de tecnologías para la gestión de activos y la planificación de recursos, algo que, según sus cálculos, puede implicar un aumento del 4% en los ingresos, una reducción de hasta el 20% en el inventario y una disminución de hasta el 10% en los costes de la cadena de suministro.
“PROFUNDA CRISIS DE TALENTO”
A juicio de la compañía, otro de los “grandes desafíos” para la industria en 2024 es la “profunda crisis de talento” a la que se enfrenta “al menos” el 78% de las empresas y que “podría amenazar su crecimiento y recuperación”.
“El aumento de la rotación de empleados ha afectado significativamente a la productividad, los horarios y los flujos de trabajo de taller a fábrica”, ha resaltado Valle.
IFS estima que en 2026 el 60% de los fabricantes invertirá en nuevas tecnologías para transformar la experiencia de los trabajadores en la fábrica y mitigar la rotación y las pérdidas de productividad, algo que, desde su punto de vista, permitirá aumentar la productividad en un 30%.
Por otro lado, IFS considera que hay una “urgencia creciente” en relación con la economía circular, algo que achaca a que el “panorama regulatorio y las políticas en torno a la misma evolucionan rápidamente”.
La compañía prevé que en 2025 el 30% de los fabricantes habrá incorporado estrategias de economía circular en sus modelos de negocio para reducir residuos y utilizar recursos de manera “más eficiente”.
“Al reutilizar materiales una y otra vez, estas empresas no solo crean resiliencia al disminuir la dependencia de materiales vírgenes, sino que también obtienen más rentabilidad del mismo producto”, ha añadido el directivo de IFS.
En esa línea, la compañía también ha apuntado que para que los fabricantes estén preparados para esta transición es necesario que cuenten con la tecnología adecuada y que diseñen sus productos con la circularidad en mente.