MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
La industria global de telecomunicaciones superará los 1,428 billones de euros en 2030, debido al crecimiento en América y los nuevos desarrollos tecnológicos que demandarán los clientes, según el informe ‘Telecommunications Risk Factor Survey 2022’, elaborado por BDO, que analiza los riesgos para estas empresas.
El análisis publicado este viernes incide en la necesidad de ajustar sus estrategias por parte de las ‘telecos’ ante las necesidades cambiantes de sus clientes y la creciente demanda de conectividad móvil y transformación digital.
Esto se une a que es un mercado de por sí intensivo en el uso de capital para el desarrollo y manutención de infraestructuras de red y tecnologías de última generación.
A esto se une la guerra de Ucrania, que ha supuesto el fin del negocio en Rusia para varias firmas del sector, y el coronavirus, una preocupación aún relevante para el 84% de las firmas encuestadas por BDO.
ULTRACOMPETENCIA
Uno de los aspectos más característicos de las telecomunicaciones, especialmente en mercados como España, es la elevada competición que existe en el mercado y que cada vez es más intensiva, de acuerdo al 90% de las empresas del sector.
“El rápido desarrollo de nuevas tecnologías, productos yservicios ha acelerado la competencia en el sector de las telecomunicaciones, lo que ha provocado que muchas empresas de este sector estén llevando a cabo una estrategia basada en la adquisición de empresas que permiten aportar soluciones rápidas competitivas ocomplementarias”, ha trasladado BDO en un comunicado.
Asimismo, el socio en el área de Risk Advisory Services de BDO, Enric Doménech, ha señalado que “no hay soluciones fáciles para afrontar y resolver estos riesgos”, pero ha incidido en la necesidad de identificarlos para poder superarlos.
Por regiones, el crecimiento del mercado americano situará su tamaño en 515.800 millones de euros, un 21,6% por encima del mercado europeo, valorado en 424.200 millones de euros, que también quedará por debajo del mercado de Asia Pacífico, valorado en 448.000 millones de euros.