Las 50 bodegas ya certificadas deberán someterse a una auditoría con los nuevos criterios sociales y económicos para mantener el sello
MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
La Federación Española del Vino (FEV) ha presentado la ampliación de su sello de sostenibilidad específico para bodegas, que pasa a denominarse ‘Sustainable Wineries for Climate Protection’ y que, a partir de 2023, incluirá, además del pilar medioambiental, criterios de sostenibilidad social, económica y de gobernanza que las bodegas certificadas deberán cumplir para obtener o renovar su certificado, según informa en un comunicado.
En concreto, el nuevo sello se ha presentando en la sede del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, donde el presidente de la FEV, Emilio Restoy, ha avanzado que el sector se encuentra en un contexto de grandes desafíos globales y, frente a ellos, “no solo no podemos dar un paso atrás en materia de sostenibilidad, sino que debemos pensar y actuar de una manera global y colectiva”.
“Con Sustainable Wineries for Climate Protection estamos ante una iniciativa muy sólida y puntera que, de nuevo, nos sitúa como sector en los niveles más altos de exigencia en cuanto a cuestiones desostenibilidad, desde un enfoque global que se alinea perfectamente con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y que da repuesta a lo que nos está pidiendo el consumidor, la distribución y la sociedad”, hadestacado Restoy.
De esta forma, todas las bodegas que soliciten el certificado a partir del próximo 1 de enero deberán superar una auditoría en la que, además de las cuestiones medioambientales exigidas hasta la fecha, se incluirán aspectos de sostenibilidad social como aquellos relacionados con los trabajadores y proveedores, el territorio y la cultura local y la seguridad y salud de los consumidores.
En el ámbito económico deberán superar criterios de eficiencia y resiliencia, mientras que en el apartado de gobernanza se incluyen metas en el ámbito del comportamiento ético, la gestión y comunicación de la sostenibilidad y la relación con los grupos de interés.
Por último, el pilar medioambiental ha sido revisado también para incorporar acciones relacionadas con el cuidado del suelo y la biodiversidad.
En la actualidad hay 50 bodegas certificadas hasta la fecha y que ya han superado la auditoria en relación a la reducción de gases de efecto invernadero, la eficiencia energética y uso de energías renovables, la gestión del agua y la reducción de residuos, y que contarán con un periodo transitorio para auditarse de los nuevos criterios sociales y económicos para mantener el sello que les acredita como bodegas sostenibles.
En la presentación estuvo el secretario general de Agricultura yAlimentación, Fernando Miranda, que ha destacado que el sello de certificación presentado hoy “es el camino que debemos seguir”. “Cada sector tiene que tener muy claro su impacto medioambiental y trabajar sobre él, sin olvidar los aspectos sociales y económicos”, ha indicado.
Miranda ha apuntado que iniciativas como ésta contribuyen a sentar las bases de un sector más rentable y competitivo, porque “para crecer en valor hay que asentar la parte de la sostenibilidad”.