MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
La facturación del sector papelero (celulosa y papel) se incrementó en un 30,84% en 2021, hasta alcanzar los 5.209 millones de euros (frente a los 3.981 millones y una caída interanual del 14% en 2020), con lo que se sitúa “claramente” por encima de los niveles previos a la pandemia, según ha informado este jueves la Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón (Aspapel).
El 56% de la facturación procedió de los mercados exteriores, a los que se destina el 46% de la producción total. De este modo, el sector papelero aumentó un 8,9% en 2021 sus ventas al exterior de papel y cartón y un 5,6% las de celulosa.
La Unión Europea se mantiene como el mayor mercado de exportación del papel (60%) y de la celulosa (73%) producida en España, principalmente Alemania, Francia, Italia y Portugal.
Las exportaciones al Reino Unido, ahora como país extracomunitario, han pasado a suponer el 9% en el caso de la celulosa (tres puntos porcentuales más que en 2020) y el 5% de las ventas al extranjero de papel (un punto porcentual más que en 2020).
La actividad del sector se incrementó en un 6,5% en 2021 frente al ejercicio anterior y se produjeron 6,7 millones de toneladas de papel y 1,8 millones de toneladas de celulosa, con una subida interanual del 6,2% en el primer segmento y del 7,7% en el segundo.
Por comunidades autónomas, el 35% de la producción total del sector salieron de las ocho fábricas instaladas en Aragón, mientras que el 20,9% correspondieron a Cataluña, el 14,4% a País Vasco y el 7,8% a Navarra, mientras que el resto se divide entre Castilla y León (6,9%), Comunidad Valenciana (3,5%) y Andalucía, Galicia, Canarias, Castilla-La Mancha, Madrid y Murcia, que en conjunto supusieron el 11,5%.
Aspapel también ha indicado que el empleo ligado a la industria papelera en 2021 creció un 0,4% y se situó en 16.705 empleos directos. “En los últimos cinco años se ha incrementado un 2,6%”, ha indicado la organización.
“FRENAZO” EN EL PRIMER CUATRIMESTRE DE 2022
“La fortaleza que la industria papelera mostró durante la pandemia como industria esencial, manteniendo abierta la práctica totalidad de sus fábricas, pese a la difícil e insólita situación, está sufriendo desde los últimos meses de 2021 el embate de la escalada de la energía, que está deteriorando la situación del sector”, ha valorado Aspapel.
Así, considera que el entorno “prometedor” de la industria papelera se está viendo “seriamente comprometido” por el aumento de los costes energéticos y, en menor medida, de las materias primas y de los fletes.
Entre enero y abril de 2022 se ha producido un “frenazo” en la recuperación con un incremento de la producción de papel de apenas el 0,4% y una caída en la celulosa del 8,3%, ha lamentado Aspapel.