MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
Los niveles de emisión de cédulas hipotecarias apuntan que 2022 podría ser un año récord de emisiones de este tipo de títulos, que previsiblemente continuarán en toda Europa, pese a la evolución desigual de los precios de la vivienda en la región.
Así lo ha señalado el equipo especialista en cédulas hipotecarias de Scope Ratings en un análisis publicado después de que Santander y Sabadell hayan vuelto a reactivar en España el mercado de cédulas hipotecarias tras el verano con nuevas emisiones. En el caso de Santander, ayer realizó la mayor operación en cédulas hipotecarias de su historia con una emisión de 3.500 millones de euros.
La emisión de cédulas hipotecarias en Europa supera los 135.000 millones de euros en lo que va de año, incluyendo las emisiones de bonos públicos de 500 millones de euros o más y excluyendo las colocaciones privadas y las emisiones retenidas por el Banco Central Europeo (BCE) como garantía.
Dicho importe supera el volumen de emisión anual registrado durante los años de pandemia y está en torno a los niveles de los años 2018 y 2019.
Según los expertos de Scope, 2022 podría convertirse en el año no solo de la armonización de las cédulas hipotecarias europeas, sino también de los volúmenes de emisión récord.
El responsable de cédulas hipotecarias de Scope, Karlo Fuchs, ha señalado que los vientos en contra de la economía están aumentando, pero la calidad crediticia de los bancos emisores y sus carteras de cobertura son “estables”.
“Más allá de los factores crediticios, la emisión de este año se ha beneficiado de una serie elementos: el estatus de activo refugio de las cédulas hipotecarias al inicio de la guerra en Ucrania, el Programa de Compra de Cédulas hipotecarias del BCE (cuando todavía estaba en modo compra) y la vuelta a los rendimientos positivos, que atrajeron de nuevo a los inversores, particularmente en el extremo largo”, ha explicado.
La directiva europea sobre cédulas hipotecarias (CBD) para todos los países emisores activos se aprobó el pasado mes de julio, aunque muchos detalles se recogerán en la legislación secundaria, necesarios para la actualización de los programas de emisión, ha apuntado el subdirector de cédulas hipotecarias de Scope, Mathias Pleissner.
“Los vientos en contra de la economía, la subida de los tipos de interés y el aumento de los diferenciales harán que en los próximos años las cédulas hipotecarias dejen de ser vistos como un producto de tipos para convertirse en un producto de crédito. Los inversores que solo están acostumbrados a diferenciales bajos tendrán que repasar sus conocimientos y hacer algunos esfuerzos. En particular, tendrán que entender los detalles e implicaciones más sutiles de la directiva europea CBD”, ha señalado Pleissner.