El valor del mercado se elevó hasta los 1.350 millones de euros, correspondiendo el 80% de la cifra de negocio a España
MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
La demanda de equipos de aire acondicionado en España y Portugal contabilizó en 2021 un repunte del 9,8%, lo que impulsó el valor del mercado hasta los 1.350 millones de euros, solo 10 millones de euros por debajo de la cifra alcanzada en 2019, según el estudio ‘Equipos de Aire Acondicionado-Mercado Ibérico’, elaborado por el Observatorio Sectorial DBK Informa.
Pese al descenso del valor del mercado registrado en 2020, en el que las ventas cayeron cerca de un 10%, el mercado del aire acondicionado ha mostrado en la última década una evolución “muy dinámica”, acumulándose un incremento de las ventas superior al 50%.
Las ventas en España se cifraron en 2021 en 1.150 millones de euros, lo que supuso el 85% del total, correspondiendo al mercado portugués los 200 millones restantes. El mercado español creció un 10% con respecto al ejercicio 2020, en el que había caído un 10,3%, mientras que en Portugal el aumento de las ventas se situó en el 8,1%, tras un descenso en 2020 del 5,1%.
Por otro lado, las importaciones globales españolas de equipos de aire acondicionado registraron un aumento del 8,1% en 2021, procediendo la mayor parte de China (66% del total) e Italia (10%). En Portugal, por su parte, las compras en el exterior crecieron un 21,8%, destacando entre los principales mercados de origen España (27%), China (25%) y Tailandia (11%).
En el sector operan unas 75 empresas, de las cuales alrededor de 45 se ubican en España y el resto en Portugal. La oferta sectorial presenta un alto grado de concentración, de manera que los cinco primeros operadores reunieron en 2021 una cuota conjunta sobre las ventas totales en el mercado ibérico del 55%, porcentaje que se sitúa casi en el 75% al considerar a los diez primeros.
Respecto a las cifras de 2022, se prevé que el valor del mercado registre un crecimiento adicional, llegando a superar la cifra prepandemia. No obstante, el aumento de los costes de explotación, los desajustes en las cadenas de suministro, la escasez de microchips, la pérdida de poder adquisitivo de los hogares por la alta inflación y el empeoramiento de la economía a consecuencia de la guerra en Ucrania son amenazas a las que se enfrenta el sector a corto plazo.