Las comunicaciones sobre el uso o intento de uso de información privilegiada suponen el 72,7% del total
MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) recibió 290 comunicaciones de operaciones sospechosas en 2021, lo que supone un aumento del 8% respecto a 2020, según ha informado hoy el supervisor en una nota de prensa.
El 86% del total de estas comunicaciones recibidas en 2021 hacen referencia a instrumentos de renta variable, la misma proporción que en el año 2020. Le siguen las comunicaciones referidas a operativa con derivados y renta fija.
Por tipología de la conducta, las comunicaciones sobre el uso o intento de uso de información privilegiada suponen el 72,7% del total, porcentaje superior a años anteriores. Le siguen intentos demanipulación de mercado (25,1%) y otros comportamientos (2%).
Las empresas de servicios de inversión (ESIS) son las entidades que más comunicaciones remiten a la CNMV, con un 66,5% del total de comunicaciones, seguidas por otras autoridades nacionales (25,5%) y los diferentes mercados (6%).
Según la información proporcionada por cada entidad, la CNMV califica las comunicaciones recibidas teniendo en cuenta si la información es completa, si la descripción de la operativa es precisa y si los indicios son suficientes, razonables y plausibles en cuanto a la posible conducta contraria a la normativa del mercado.
Así, con respecto a la calidad de la información remitida por las entidades, la CNMV indica que ésta ha mejorado en términos generales en comparación con el año anterior: el 62% de las comunicaciones tiene una calidad “media/alta”, frente al porcentaje del 57% de 2020.
Sobre los aspectos a mejorar en la calidad de las notificaciones, el supervisor destaca la identificación de la lógica y coherencia de la conducta comunicada a los efectos de considerar la existencia de posibles indicios de abuso de mercado, así como profundizar en el análisis del perfil inversor del cliente sospechoso y su relación con el instrumento financiero en cuestión.
En cuanto al plazo de comunicación de las operaciones sospechosas, la CNMV recuerda que éstas deben de enviarse a la autoridad competente “sin demora”. En este sentido, las autoridades de la Unión Europea han acordado en el marco de ESMA un plazo de 60 días naturales, como orientación de lo que en general se considera razonable.
El número de comunicaciones recibidas por entidades financieras con un cierto desfase temporal en 2021 asciende a 27, remitidas por siete entidades. Esto supone una disminución del 40% con respecto al año precedente, ya que estas comunicaciones tardías han supuesto solo un 14% del total.
El supervisor recuerda que las operaciones y órdenes detectadas, así como las cancelaciones y modificaciones que pudieran ser constitutivas de abuso de mercado “deben ser notificadas a la autoridad competente del país”, en este caso, la propia CNMV, según lo establecido en el reglamento europeo sobre abuso de mercado.
Cuando dichas comunicaciones afectan a valores extranjeros, las autoridades las redirigen a la autoridad competente del valor en cuestión.