“Irán no quiere la guerra abierta con Israel, tiene mucho que perder y nada que ganar”. De Arístegui
La tensión en Oriente Medio a la espera de cómo será el ataque de Israel y si llegará a las instalaciones nucleares y petroleras de Irán. “Esto no es ni el 82 ni 2006”, ahí no existía Hezbolá y la estrategia de ahora no es comparable. “Esto lleva planificándose más de un año, no se consigue eliminar al líder de Hamás de casualidad”, porque Israel sabía dónde se encontraba, detalla Gustavo de Arístegui, diplomático y analista. En un momento donde el líder Hasán Nasralá había propuesto una tregua de 26 días a EEUU y Francia, “porque le estaban dando muy duro”.
Turquía quiere que siga la inestabilidad en Oriente Medio, para entrar y salir de Siria a su aire y Rusia también está interesado, porque un Oriente Medio en caos le permite seguir con su venta de armas y tráfico con Irán. Y por supuesto, el mayor beneficiario es Irán, aunque China le corta el grifo a los hutíes por la crisis del comercio internacional. “Como salte una chispa la escalada será general, estamos en pleno polvorín”.
“Es muy difícil que Israel se frene teniendo el poder sobre Hezbolá”, aunque Irán seguirá dando armas sofisticadas a Hezbolá, pero “no podrá poner en peligro a Israel como hasta ahora”, manifiesta Gustavo Arístegui.