Este 1 de julio Hungría asume la presidencia rotatoria de la Unión Europea con incertidumbre sobre la posición que pueda adoptar Orban. Bruselas ha estado acelerando la toma de decisiones importantes mientras aún estaba al mando, como el inicio de las negociaciones de adhesión con Ucrania y Moldavia. Hungría ya avisó de que ese proceso no se desarrollará, al menos, durante los 6 meses de su presidencia de turno.
El lema que Hungría ha elegido para su tiempo al mando de la UE es un claro apunte de sus intenciones: Make Europe Great Again (Hacer Europa grande otra vez). Se espera que Viktor Orban intente forzar a la Comisión Europea a que descongele los fondos que Budapest tiene bloqueados por no cumplir los dictados comunitarios respecto al Estado de Derecho, por lo que tiene abierto un procedimiento.