El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, fue recibido este jueves en Londres por el primer ministro británico, Keir Starmer, y el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, para discutir su “plan de victoria” contra Rusia.
A la llegada de Rutte, Starmer declaró que había mantenido una reunión con Zelenski “toda la mañana, repasando el plan para la victoria”. Mientras que el nuevo jefe de la OTAN destacó que la reunión “se trata de Ucrania, pero también se trata de la defensa de Occidente y de cómo mantenernos seguros“; anteriormente Rutte había prometido mantener la cuestión ucraniana entre sus prioridades y visitó Kiev la semana pasada, tan solo dos días después de asumir el cargo.
El Gobierno ucraniano ha pedido en reiteradas ocasiones, tanto a Londres como a Washington, que su ejército pueda utilizar misiles de fabricación británica contra Rusia y se cree que esto fue discutido en la conversación entre los tres dirigentes; y también sobre que Ucrania se convierta en miembro de la OTAN.
Por el momento, el “plan de victoria” es muy vago, pero este será desvelado en una cumbre por la paz en el mes de noviembre, en una fecha por definir.
La gira de Zelenski por Europa
Zelenski tenía previsto presentar su plan a los líderes occidentales en una cumbre en la base aérea estadounidense de Ramstein en Alemania esta semana, pero el evento se pospuso debido a que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, canceló su viaje a Alemania debido al paso del huracán Milton por Florida.
Sin embargo, este miércoles por la noche se anunció una gira por Europa que el presidente ucraniano realizará en los próximos días. Tras su paso por Londres, Zelenski viajará a París para reunirse al mediodía con Emmanuel Macron y posteriormente verá en Roma a la primera ministra italiana, Giorgia Meloni. El viernes por la mañana será recibido por el papa Francisico en el Vaticano y el mismo día prevé estar en Berlín para entrevistarse con el canciller, Olaf Scholz.
Durante su gira, Zelenski reiterará su pedido de armas y equipamiento militares, en un momento muy delicado para su país ante los recientes progresos realizados por las fuerzas rusas en el este de Ucrania.
Por otro lado, el Instituto de investigación alemán Kiel avisó este jueves de que la ayuda occidental a Ucrania podría aminorar considerablemente en los próximos meses.
“A partir del próximo año, Ucrania podría enfrentar un importante déficit de ayuda”, publicó en un comunicado el instituto. Esto ocasionado ante un posible triunfo electoral de Trump.
El presidente Zelenski ha presionado muy insistentemente a sus socios occidentales en los últimos meses, en este caso por su reticencia a entregar misiles de largo alcance, que permitirían a Ucrania golpear objetivos lejanos en Rusia.
El desbloqueo de los misiles parecía cercano hace apenas unas semanas tras la visita de Starmer a la Casa Blanca, pero las conversaciones se han estancado recientemente ante el temor a una escalada del conflicto con Rusia por el uso de armamento nuclear.