MADRID, 25 (EUROPA PRESS)
El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ve “complicado” llegar a un acuerdo con el Gobierno y los sindicatos sobre la reforma del sistema de pensiones antes de fin de año, para cumplir así con el compromiso del Ejecutivo con Bruselas.
Garamendi ha asegurado este viernes, en una entrevista en ‘Las Mañanas’ de RNE, recogida por Europa Press, que la patronal no ha recibido todavía “ningún papel” del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
“A mí me preocupa. Creo que el tema de las pensiones, que es un tema muy serio, no es tanto un problema de decir qué pasa este año como el decir qué tenemos que hacer para que esto sea sostenible”, ha comentado el presidente de los empresarios.
Garamendi ha insistido en que todos los partidos, y no solo el Gobierno y los agentes sociales, deberían “hablar seriamente y sin tapujos” de la sostenibilidad del sistema de pensiones para hacer “las cosas bien”.
En su opinión, el Pacto de Toledo tiene que sentarse para “poner el cascabel al gato” y abordar cuestiones como los años de cotización, las tablas de mortalidad o el factor de sostenibilidad.
“Yo estoy en el ‘baby boom’ (generación nacida entre finales de la década de 1950 hasta la década de 1970), pero me preocupan los ‘babies’, que son mis hijos, las próximas generaciones, que son los que también tienen que tener el derecho a jubilarse. Eso es España y eso es lo que la Constitución nos manda”, ha explicado Garamendi.
“AJUSTAR COSAS” EN EL SMI
El Ministerio de Trabajo y Economía Social convocará en unas semanas a los agentes sociales paran negociar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para 2023.
El Gobierno y los sindicatos comparten la intención de subir el SMI y, en concreto, el Ejecutivo aspira a cumplir su compromiso de fijar el SMI de 2023 en el 60% del salario medio español.
El presidente de la CEOE cree que el planteamiento de Trabajo “no es real” y se opone a indexarlo al IPC para evitar generar “la famosa inflación de segunda ronda”.
“No estoy diciendo que no suba”, ha aclarado Garamendi, que se ha mostrado partidario de que el SMI se revise según el sector y el territorio.
Además, ha recordado que la ley establece que es el Gobierno el que fija el SMI, previa consulta con los agentes sociales. El artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores recoge, también, que debe tenerse en cuenta el IPC, la productividad media nacional alcanzada, el incremento de la participación del trabajo en la renta nacional y la coyuntura económica general.
Garamendi también ha reprochado al Gobierno que exijan una subida del SMI a los empresarios mientras que los contratos públicos no recogen esa indexación.
La CEOE y los sindicatos tienen pendiente desde mayo la negociación del Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), aunque Garamendi ha restado importancia a esta cuestión y ha recalcado que los convenios colectivos “están avanzando” y que cuentan “con rango normativo”.
El presidente de los empresarios ha recalcado que el AENC y pacto de rentas no son sinónimos y ha advertido de que el término “se está deteriorando”. Para Garamendi, el pacto de rentas debe incluir, también, funcionarios, pensiones, SMI y AENC.
Pese al enfriamiento de las relaciones con los sindicatos en los últimos meses, el presidente de la CEOE, que también ha hablado este viernes en ‘La Hora de La1’, de TVE, ha agradecido la labor de estos en el diálogo social y en su contribución a la “paz social que hace que el país funcione”. “Seguiremos trabajando en ese diálogo social, que es clave para que esto funcione”, ha garantizado.
FALTA DE ORTODOXIA ECONÓMICA EN LOS PRESUPUESTOS
Sobre la evolución de la economía, el presidente de los empresarios no descarta que España acumule “un par de trimestre negativos”, aunque ha evitado “la palabra recesión”.
Garamendi pronostica “vacas flacas” en los próximos meses y considera que los Prepuestos Generales del Estado (PGE) para 2023, aprobados la tarde del jueves en el Congreso, no están pensados para hacer frente a esas situaciones.
“No estamos compartiendo estos presupuestos”, ha subrayado, al tiempo que ha recordado que la deuda pública asciende al 117% y que los tipos de interés podrían seguir subiendo hasta el 2,5%.
El presiente de la CEOE califica estos presupuestos como “expansivos” en un momento que, a su juicio, exige “enderezar la nave” para afrontar los próximos años con “rigor presupuestario, más ortodoxia económica y más realismo”.
Garamendi también se ha mostrado partidario de que las empresas recurran ante los tribunales los impuestos a la banca y a las energéticas y cree que es “totalmente lógico” que opten por esa vía.
En cuanto a las dudas sobre la vigencia de la subvención del combustible más allá de diciembre, el presidente de la CEOE aboga por evaluar el impacto de esta medida para ayudar “a la gente que lo necesita” y no convertir estas bonificaciones en plusvalías.
A su juicio, estas subvenciones tendrían que ser “selectivas y temporales”, porque convertirlas en “genéricas y para siempre” sería “un error”.
“Creo que se revise cuáles son sectores a los que sí les influye muchísimo este tema, como transportistas o logísticas, tiene todo el sentido”, ha expresado.
Preguntado por el permiso retribuido de cinco días al año para trabajadores por cuidado de convivientes que incluirá la Ley de Familias, Garamendi ha reconocido que “como ciudadano” le parece bien “todo lo que sea conciliación de la vida familiar y ayuda a la familia”.
Sin embargo, como empresario echa en falta una consulta previa por parte del Gobierno para saber de qué se está hablando y cómo se aplicará.
“No me parece bien que el Gobierno diga: qué medida tan buena tengo y la pagas tú. Soy el primero que lo apoya, pero no me vale decir sí, pero lo pagas tú. Habría que ver cómo el Estado compensa a las empresas por ese pago, qué hay que hacer de esos días, que son días que se deja de trabajar, con lo que puede suponer”, ha planteado el presidente de la CEOE.
DOS MANDATOS
Garamendi logró este miércoles la reelección para un segundo mandato al frente de la CEOE. El empresario vasco se impuso por 534 votos a su contrincante, la vicepresidenta de Foment del Treball, Virginia Guinda, que obtuvo 87.
“Esto no es un éxito mío, es un éxito de todos, que han refrendado cómo hemos trabajado durante estos años que han sido muy complicados”, ha expuesto.
Para el presidente de la CEOE, ese resultado respalda la línea de trabajo, “con firmeza pero con moderación”, que ha marcado en sus primeros cuatro años de mandato. En los cuatro siguientes, seguirá “con ganas de ayudar y de sumar” para continuar “atendiendo a las empresas”.
“Vienen años complicados. Nos tenemos que poner las pilas porque vienen situaciones más complicadas. Vamos a tener una situación económica más difícil y creo que es importante que la sociedad en conjunto este unida”, ha pedido Garamendi.
El presidente de los empresarios españoles ha dicho que por el momento no se plantea modificar los Estatutos de la CEOE, que limitan a dos mandatos la presidencia, y ha recordado que nunca ha estado “más de ocho años en los sitios”.