La Xunta arrancará en marzo una campaña de vacunación preventiva
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 17 (EUROPA PRESS)
La Xunta ha comunicado al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación la detección de cuatro focos de lengua azul en bovinos en otros tantos municipios de las provincias de Pontevedra y Ourense, una enfermedad sin nuevos casos en la comunidad desde 2009.
En concreto, el plan de vigilancia de esta enfermedad detectó los casos de lengua azul de serotipo cuatro en reses de Castro Caldelas, Sarreaus, Fornelos de Montres y As Neves –donde dieron positivo dos animales de la misma explotación–. Los resultados han sido confirmados por el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete, de referencia nacional.
Estos focos, ha avanzado la Xunta, supondrán la adopción de medidas por parte del Gobierno gallego, como el inicio de una campaña de vacunación preventiva y servicios de desinsectación por parte de los centros de limpieza y desinfección de vehículos que dependen de la Consellería do Medio Rural.
La lengua azul es una enfermedad vírica de carácter infeccioso no contagioso (no se tramite por contacto directo de unos animales a otros), transmitida por diferentes especies de mosquitos del género Culicoides, que pasan la enfermedad por la picadura a animales infectados y, posteriormente, a animales sanos.
El momento actual, apunta el Gobierno gallego, es una época libre de vector, es decir, no hay mosquito transmisor, lo que quiere decir que los animales detectados se infectaron antes del mes de noviembre. Hoy en día mantienen el virus, aunque no presentan ningún síntoma.
La lengua azul, insiste la Xunta, no es una zoonosis, es decir, no es transmisible a las personas, ni por contacto directo con los ejemplares positivos ni por consumo de productos cárnicos.
DECLARACIÓN DE ZONA DE RESTRICCIÓN
La declaración de los focos supone la creación de una zona de restricción de, al menos, un radio de 50 kilómetros alrededor de los casos detectados, considerando siempre comarcas veterinarias completas.
Según esto, la zona de restricción en la comunidad incluye las provincias de Ourense y Pontevedra en su totalidad, y las comarcas veterinarias de Chantada, Terra de Lemos-Quiroga y Sarria, en el sur de Lugo.
Así, en estas áreas será obligatoria la vacunación de todos los animales de la especie ovina y bovina de más de tres meses de edad. En esa línea, finalizada la época estacionalmente libre del vector -a mediados-finales de abril- en estas zonas sólo se podrá autorizar el movimiento de animales si proceden de explotaciones vacunadas, y los animales están vacunados (sólo posible a partir de los tres meses), o son animales menores de esa edad procedentes de madres vacunadas. Además, deberán ser transportados en vehículos que sean desinsectados antes de la carga.
La Consellería do Medio Rural ya está organizando la realización de la pertinente vacunación para comenzar en el próximo mes de marzo. A mayores, está previsto que cuando finalice la época estacionalmente libre del vector, los centros de limpieza y desinfección de vehículos que dependen de la consellería comiencen a prestar el servicio de desinsectación.
La última vez que en Galicia se detectó esta dolencia fue en los años 2008 y 2009, aunque en aquella ocasión el serotipo que afectó a la cabaña fue el 8 (S-8). Se erradicó la enfermedad mediante vacunación.
Desde esa época, en el conjunto del Estado se realiza un programa anual continuo de vigilancia de la presencia de esta enfermedad, que consta de un componente de vigilancia entomológica (captura de mosquitos semanalmente durante todo el año) y un componente de vigilancia sobre los animales domésticos sensibles. Dentro de este último apartado, se realizan dos muestreos anuales sobre un número de animales pertenecientes a rebaños centinelas de ganado bovino previamente seleccionados, y fue en el marco del último muestreo en la que se detectaron los focos positivos.