MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
El crecimiento de la actividad de las empresas en Alemania y Francia se ha frenado sustancialmente en el mes de junio, hasta registrar mínimos de los últimos seis y cinco meses, respectivamente, según el índice compuesto de gestores de compra (PMI), que refleja el crecimiento impacto de la inflación sobre la demanda y la pérdida de casi todo el impulso recibido por el levantamiento de las restricciones contra la Covid-19.
En el caso de Alemania, el PMI compuesto se ha situado en junio en 51,3 puntos, frente a los 53,7 del mes anterior, lo que supone su peor lectura en seis meses, con un resultado de 52,4 puntos del PMI del sector servicios, su nivel más bajo en cinco meses, mientras que el PMI manufacturero se situó en 52 puntos, en mínimos de 23 meses.
“Los datos preliminares del PMI de junio muestran que la economía de Alemania ha perdido prácticamente todo el impulso obtenido con la relajación de las restricciones relacionadas con el virus”, ha advertido Phil Smith, economista de S&P Global, para quien la mayor causa de preocupación es la disminución generalizada de la demanda, con una caída cada vez más profunda en los nuevos pedidos de fabricación como consecuencia del aumento de los precios y los elevados niveles de incertidumbre.
De su lado, el PMI compuesto de Francia se ha situado en 52,8 puntos, frente a los 57 de mayo, su peor resultado en cinco meses, con un PMI de servicios de 54,4 enteros, el más bajo en cinco meses, mientras que el PMI manufacturero se ha situado en mínimos de 19 meses, con una lectura de 51 puntos.
Además del impacto de la inflación, en el país galo el deterioro del crecimiento refleja también “un nuevo episodio de incertidumbre política”, lo que ha llevado a la confianza empresarial a mínimos de 19 meses, ha indicado Joe Hayes, economista de S&P Global, para quien los datos preliminares del PMI se suman a los riesgos tangibles de recesión en Francia.