MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Endesa e Izertis han firmado un acuerdo para la integración, explotación y mantenimiento del proyecto ‘CONFÍA’, financiado por la Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA) y dirigido a la protección energética de colectivos vulnerables, después del éxito de las pruebas realizadas el año pasado en el Ayuntamiento de Málaga, informó la compañía.
En concreto, la iniciativa, pionera en toda Europa, tiene como objetivo detectar lo antes posible a los consumidores que se encuentran en situación de vulnerabilidad severa en riesgo de exclusión para que se puedan gestionar las ayudas que contempla la legislación a tiempo.
Izertis, ‘business partner’ de IBM, desplegará el servicio que ha sido creado sobre la plataforma IBM Blockchain, en los 20 ayuntamientos españoles que lo soliciten. Tras un periodo de validación de dos meses, se espera que pueda ser ofrecida a los consistorios y comercializadoras que lo requieran.
La utilización de ‘CONFÍA’ permite a ayuntamientos, comercializadoras y comunidades autónomas detectar en tiempo real a los usuarios vulnerables en riesgo de exclusión social, recibiendo los datos necesarios para verificar al instante si se trata de una persona que cumple con los criterios para beneficiarse del bono social.
La tecnología IBM Blockchain, disponible en IBMCloud, permite almacenar la información en una base de datos distribuida y gestionarla por todos los implicados de manera encriptada y segura, manteniendo las operaciones de manera transparente y trazable, respetando la normativa sobre protección de datos y derecho al olvido.
El responsable de Innovación Comercial de Endesa y director de este proyecto, José Mínguez, destacó que para el grupo la implantación de ‘CONFÍA’ cumple el compromiso de la compañía con la ‘innovability’ (la Innovación al servicio de la Sostenibilidad), “en este caso empleando una tecnología puntera como ‘blockchain’, al servicio de los más desfavorecidos”.
“Nuestro deseo es que este piloto con 20 ayuntamientos sea un paso firme para demostrar que la tecnología está preparada para extender los beneficios del proyecto a todo el territorio nacional lo antes posible”, añadió.
El proyecto arrancó en 2019 con un ensayo piloto en el consistorio malagueño. Tras un periodo de prueba con 20 ayuntamientos durante dos meses, estará disponible para el resto de ayuntamientos españoles y para otras comercializadoras de energía.