MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
Más de la mitad de los uruguayos (el 54%) está en desacuerdo con la aprobación de la reforma de las pensiones que propone aumentar la edad de jubilación de los 60 a los 65 años y que está a la espera de su aprobación final en la Cámara de Diputados para convertirse en ley, representando este porcentaje un aumento del rechazo que suscita este proyecto frente al 49% que se mostraba en contra en julio del año pasado.
Así lo revela una encuesta elaborada por la consultora uruguaya Cifra, en la que se refleja una caída del apoyo a la reforma, pasando de un 30% de la población al 27%. Es decir, menos de tres de cada diez uruguayos estarían a favor de la propuesta, mientras que hasta un 19% no tiene una posición clara.
Por tramos de edad se dan algunas diferencias, aunque en todos los grupos la mayoría absoluta está en contra. Los más opuestos a la reforma son las personas en el pico de la edad activa (los de 30 a 44 años) y las que se acercan a la edad de jubilarse (los de 45 a 59 años).
Hay más diferencia en las posiciones según nivel de ingresos. Quienes están más en contra son los sectores de ingresos bajos, y donde se registra relativamente más apoyo es en el grupo de ingresos más altos.
En las últimas semanas los sindicatos de Uruguay han llamado a las movilizaciones en contra de la reforma. El Plenario Intersindical de Trabajadores-Convención Nacional de Trabajadores (el PIT-CNT la principal organización de los trabajadores en el país) ha manifestado que el proyecto nace sin el apoyo popular y va “en contra” de las grandes mayorías.
Ante las críticas, el ministro de Trabajo y Seguridad Social de Uruguay, Pablo Mieres, ha negado que la reforma sea “perjudicial” para los trabajadores y ha afirmado que es “inevitable” ampliar la edad de jubilación.