Aclara que no conllevaría ni la nacionalización del sistema bancario ni la estatalización del crédito
MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
El PSOE ha planteado en el Congreso impulsar el estudio de un euro digital como moneda pública, ante la paulatina desaparición del dinero en efectivo y el auge de nuevas formas de pago, como las criptomonedas o los sistemas de ‘banca en la sombra’, y recuperar así el “control democrático” de la política monetaria.
Así, la formación defiende este proyecto como la posibilidad de recuperar el dinero “como bien público, más estable y bajo control democrático, al estar bajo control de un banco central”, en el que la ciudadanía pueda tener alojada directamente sus cuentas.
Así lo plantean en una proposición no de ley registrada en la Cámara Baja, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la que piden impulsar, en colaboración con el Banco de España, la creación de un grupo de estudios para evaluar el desarrollo de un euro digital para “ofrecer una mayor estabilidad financiera tanto a la economía española como al conjunto de la eurozona y recuperar el carácter del dinero como bien público y bajo control democráctico”.
SI ACABA EL EFECTIVO, SOLO HABRÁ DINERO BANCARIO Y PRIVADO
En su exposición de motivos, el PSOE explica el debate de la posibilidad de crear nuevas monedas digitales públicas (CBDC, en sus siglas en inglés, por Central Bank Digital Currency, o ‘Moneda Digital del Banco Central’), y revela que más de un 80% de instituciones consultadas en 2020 por el Banco de Pagos Internacionales de Basilea ya trabajan en proyectos de este tipo.
Entre sus motivos, citan el auge de nuevas formas de pago, como las criptomonedas, la llamada ‘banca en la sombra’, ajena al sistema bancario y su regulación, sus posibilidades de inclusión financiera –la primera CBDC, creada en Bahamas, fue creada con esta motivación– y también el declive del uso del efectivo, algo que mejora el rastreo de operaciones y limita las posibilidades de fraude.
LOS BENEFICIOS DE UNA BANCA PÚBLICA DE DEPÓSITOS
Sin embargo, alerta el PSOE, esta desaparición provocaría que todo el dinero en circulación fuese bancario y privado. “Implicaría una mayor inestabilidad que justamente trató de minimizar la creación de los bancos centrales tal y como los conocemos”, reflexiona esta formación, que plantea dinero público digital, intangible, respaldado por el Estado, y depositado en una cuenta directamente en el banco central. “Un privilegio, por el momento, restringido a los bancos”, señala.
Que los particulares puedan tener cuentas abiertas en un banco central, prosigue, permite “un control directo de la cantidad de dinero, un dinero digital público, seguro al estar respaldado por el Estado y anónimo, en la medida en que los datos sobre transacciones estarían legalmente protegidos, y ajenos a explotación comercial como sí puede suceder con otros sistemas privados”.
Es más, señala cómo, en caso de necesitar una expansión monetaria, el mecanismo sería más directo al inyectar liquidez directamente sobre cuentas corrientes y trasladarse de forma inmediata y sin intermediarios a la actividad económica.
CONCESIÓN DE CRÉDITOS PRIVADA, PERO DEPÓSITOS PÚBLICOS
El PSOE matiza que este dinero digital público no conllevaría ni la nacionalización del sistema bancario ni la estatalización del crédito, pues tanto en una variante de moneda pública directa, hasta otras híbridas o intermedias, no desaparecería la actividad privada de crédito.
Es más, argumenta que sería más segura, en la medida en que estaría completamente separada de los depósitos de los ahorradores, y que así también la creación de dinero dejaría de depender de la expansión crediticia, aminorando el riesgo de un sobreendeudamiento privado.
Tampoco desaparecerían los medios de pago privados, apostilla el PSOE, señalando que la mayoría de proyectos de CBDC planteados son reacios a monopolizar este sector, y apuestan por modelos híbridos en el que el dinero público digital compite con otros medios de pago privados.