MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El precio promedio de la luz para los clientes de tarifa regulada vinculados al mercado mayorista caerá este miércoles un 30,9% con respecto a ayer martes, hasta los 80,44 euros/MWh, según los datos provisionales del Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE) recogidos por Europa Press.
Este precio es el resultado de sumar el promedio de la subasta en el mercado mayorista a la compensación que pagará la demanda a las centrales de ciclo combinado por la aplicación de la ‘excepción ibérica’ para topar el precio del gas para la generación de electricidad.
De esta manera, el precio de la luz para este miércoles para los consumidores acogidos a la tarifa regulada, el denominado PVPC, será el más bajo desde que entró en vigor la excepción ibérica, a mediados de junio, y el más barato desde octubre del año pasado.
En la subasta, el precio medio de la luz en el mercado mayorista –el denominado ‘pool’– se sitúa para este miércoles en 81,71 euros/MWh. El precio máximo se registrará entre las 21.00 y las 22.00 horas, con 136,74 euros/MWh, mientras que el mínimo para la jornada, de 48,37 euros/MWh, se dará entre las 15.00 y las 16.00 horas.
A este precio del ‘pool’ se suma la compensación a las gasistas que tiene que ser abonada por los consumidores beneficiarios de la medida, los consumidores de la tarifa regulada (PVPC) o los que, a pesar de estar en el mercado libre, tienen una tarifa indexada, que en esta ocasión para este miércoles por primera vez desde que existe el mecanismo arroja un saldo negativo con -1,27 euros/MWh.
Fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico indicaron que este ajuste del gas es negativo debido a que el bajo precio del gas en el mercado, que deja el precio de referencia para las centrales de gas en 41,49 euros por megavatio hora (MWh), muy cerca del precio de referencia de 40 euros/MWh del mecanismo ibérico.
Así, al considerar los ingresos derivados de las rentas de congestión de la interconexión con Francia, en un 50% destinadas a sufragar el coste del ajuste del gas, resulta ese valor negativo.
Con la aplicación del mecanismo ibérico, excepcionalmente, las rentas de congestión -dirigidas en principio a sufragar los costes de construcción de red para reducir la congestión- que se generen durante su aplicación se destinarán a minorar el coste de ajuste a las centrales de gas. De esta manera, en caso de que en una determinada hora el precio la interconexión se sature en sentido exportador, se produce el denominado ‘desacoplamiento de mercados’, es decir, aparece un precio en España (más bajo) y otro en Francia (más alto).
En estas circunstancias, una comercializadora francesa que compre energía en España a través de la interconexión pagará el precio de Francia (más caro). Mientras, la central española percibirá el precio español (más bajo) y la diferencia entre ambos es la renta de congestión, que reducirá el coste del ajuste, explicaron las mismas fuentes.
UN 4,6% MENOS QUE SIN APLICARSE LA MEDIDA
En concreto, si no se aplicara este mecanismo para topar el precio del gas para la generación de electricidad, el precio de la electricidad en España sería de media unos 84,42 euros/MWh, lo que supone casi cuatro euros/MWh más que con la compensación para los clientes de la tarifa regulada, que pagarán así un 4,68% menos de media.
El ‘mecanismo ibérico’, que entró en vigor el pasado 15 de junio, limita el precio del gas para la generación eléctrica a una media de 48,8 euros por MWh durante un periodo de doce meses, cubriendo así el próximo invierno, periodo en el que los precios de la energía son más caros.
En concreto, la ‘excepción ibérica’ fija una senda para el gas natural para generación de electricidad de un precio de 40 euros/MWh en los seis meses iniciales, y posteriormente, un incremento mensual de cinco euros/MWh hasta la finalización de la medida.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha lanzado a información pública una propuesta de real decreto para reducir la volatilidad de la tarifa regulada, el denominado PVPC, con el fin de aportar una mayor estabilidad a una tarifa que se ha visto especialmente impactada por la volatilidad del mercado eléctrico en el último año, dando mayor peso a las referencias a los mercados de futuros, que crecerán progresivamente hasta representar el 55% en 2025.
La propuesta plantea incorporar a la fórmula de cálculo del PVPC –contratada por los titulares de unos nueve millones de puntos de suministro, el 35% del país– una cesta de precios a medio y largo plazo para evitar las fuertes oscilaciones, sin perder las referencias de precios a corto plazo que fomentan el ahorro y el consumo eficiente.