El 44% de los pagos se realizan de forma puntual, la cifra más alta desde 2020, según Informa D&B
MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
El plazo medio de pago en el que las empresas españolas hacen efectivas sus facturas se situó en 95,12 días en el cuarto trimestre de 2022, cerca de dos días por debajo de principios de año, según el ‘Estudio sobre Comportamiento de Pago de las Empresas Españolas’ publicado por Informa D&B.
Esta cifra es casi un día inferior a la del trimestre anterior, sumando ya tres consecutivos de caída, y 1,36 días menos que hace un año, cuando alcanzaba los 96,48 días. Esto se debe a que se reduce el periodo pactado para hacer efectivas las facturas en un día respecto al tercer trimestre, 1,76 desde el primero, para quedar en 80,58 días.
Sin embargo, este trimestre el retraso medio en los pagos (diferencia días de pago real y pago pactado) ha subido por segundo trimestre hasta 14,53 días, algo más que los 14,45 del trimestre precedente, pero 0,68 días por debajo en esta ocasión que en el mismo periodo en 2021. A lo largo de 2022 se ha mantenido en todo momento por debajo de los 15 días.
EL 44% DE LOS PAGOS SON PUNTUALES
La proporción de pagos puntuales es del 44,36%, porcentaje cercano al de hace un año cuando sobrepasaba el 43,9%, siendo la tasa más alta desde el tercer trimestre de 2020. Si añadimos los pagos con hasta 30 días de retraso supera el 91%, mientras que los pagos a más de 60 días se quedan en el 5,7%, frente al 6,2% que suponían hace un año.
Para la directora de Estudios de Informa D&B, Nathalie Gianese, pese a la inflación y el aumento de los costes, las condiciones de pago pactadas y los retrasos han disminuido desde hace un año, hasta 95,12 y 14,53 días respectivamente, lo que se debe “al esfuerzo de las empresas” por mantener sus condiciones comerciales con los proveedores.
En cifras, los retrasos producidos suponen un coste directo para el conjunto del tejido empresarial español de 2.562 millones de euros.
ADMINISTRACIÓN, EL SECTOR QUE MÁS DILATA LOS PAGOS
Por sectores, administración es el sector que más dilata sus pagos sobre los plazos pactados al final de 2022, con una demora media de 28,45 días, siendo el que más suma desde el trimestre anterior, casi un día. Le sigue hostelería, que se queda en 23,39 días y experimenta la mayor bajada desde hace un año, restando 5 días.
Solo tres sectores incrementan su retraso medio desde el último trimestre de 2021, siendo estos agricultura (0,58 días), transportes (0,39 días) y la administración (1,82 días). Por su parte, con mejor comportamiento que la media nacional se encuentran comercio (13,13 días), comunicaciones (12,96 días), industria (11,19) e industrias extractivas (11,01).
Por tamaño, las microempresas son las más cumplidoras. El 50,55% de estas se ajustan a los plazos, seguidas por las pequeñas empresas (el 43,7%), y frente a las grandes y medianas empresas, que son las que más se dilatan (solo cumplen el 12,6% y el 28,1%, respectivamente).
MEJORA DE LAS CIFRAS EN LA MAYORÍA DE COMUNIDADES, EXCEPTO EN CUATRO
Los datos de pago han mejorado en 2022 en la mayor parte de las comunidades desde hace un año, excepto en Castilla-La Mancha, La Rioja, Andalucía y Extremadura. Los mayores descensos se han dado en Melilla, que baja 12,32 días, Ceuta (con un descenso de 5,35 días), y Canarias (recorta 3,03 días).
Con todo, tanto Melilla como Canarias encabezan los retrasos, con 22,26 días y 21 días, respectivamente, siendo las dos únicas regiones que se han situado por encima de los 20 días. A continuación se encuentra Extremadura, con 19,61 días de demora. En el lado contrario, solo Navarra y el País Vasco pagan con menos de 11 días de retraso (9,22 días de dilación, y 10,79,respectivamente).
En 2017 hasta cinco comunidades españolas pagaban más del 60% de sus facturas puntualmente. Sin embargo, en el cuarto trimestre de 2022, tan solo Aragón y Navarra superan el 50%, con un 51,29% y un 52,15% respectivamente. El País Vasco lo roza (49,97%), mientras que Canarias es la autonomía menos cumplidora, con un 33,63% de pagos a tiempo.