El miedo impulsa al oro a ser el rey ante un dólar débil que se hunde. ¿Y ahora qué?
Donald Trump, para la mirada del inversor, estaría hundiendo el dólar frente a la paridad contra el euro. La guerra monetaria, más que la comercial, está reflejando que el plan de Trump se trataría de arreglar la balanza comercial a través de lo monetario -y no de lo arancelario-. Un dólar débil, un dólar que pierde su poder porque a EEUU le interesa que ocurra. Le interesa para exportar barato, reconquistar territorio comercial y poder volver a competir con China. En zonas como América y Europa. Empieza a reflejar que esto no es una guerra comercial, sino una monetaria que debilita al dólar. El inversor, comienza a ver alrededor del dólar que no se recupera como refugio.
Sin embargo, quien coge cada vez más terreno para el refugio es el oro. El oro es el rey absoluto frente a un camino que va hacia la estanflación. Donde la inflación no ha llegado al 2%. Estancamiento económico con inflación elevada es la situación que hace irse al inversor hacia su refugio: el oro.